¿Cómo sigue la posibilidad de lluvias para España a medio plazo?

Las previsiones a medio/largo plazo mantienen la posible llegada de lluvias al oeste peninsular de cara a la recta final de este mes de noviembre.

La pasada semana veíamos cómo las previsiones semanales de uno de los principales modelos meteorológicos del mundo (el modelo europeo) insinúan un posible episodio de lluvias para muchas zonas de la península hacia el 20-25 de noviembre, y también esta semana conviene estar muy pendientes de la evolución de dichas previsiones para esas fechas.

Y es que ahora otro de los grandes modelos meteorológicos, el modelo americano, también se apunta a mostrar una tendencia lluviosa para el tramo final del mes.

El mapa superior indica las anomalías positivas de precipitación (colores verdes) previstas para la semana del 20 al 27 de noviembre, con un patrón calcado al que viene mostrado el modelo europeo en sus últimas actualizaciones.

Destacan claros signos de inestabilidad al oeste peninsular, con el probable acercamiento de borrascas atlánticas y la entrada de algunos frentes con precipitaciones generosas en buena parte de la mitad oeste peninsular.

Coincidencias entre importantes modelos que otorgan aún más confianza en hacer realidad este hipotético escenario de abundante inestabilidad.

Un patrón de tiempo templado e inestable que, además, este modelo en particular también se atreve a mantener de cara a la semana siguiente, para finales de noviembre y principios de diciembre, incluso con una mayor incidencia en la mitad occidental de la península Ibérica.

Ya veremos si dichos cambios llegan para el 20-25 de noviembre, se retrasan hasta finales de mes, o quién sabe si hasta para principios de diciembre... pero la buena noticia es que se intuyen cambios evidentes.

¿QUÉ HARÍAN LAS TEMPERATURAS PARA ENTONCES?

Con la entrada de lluvias desde el oeste, las temperaturas estarían bastante limitadas por la llegada de aire templado y húmedo desde el Atlántico, algo que precisamente también muestran estas previsiones semanales, con una tendencia mayormente cálida sobre la península, pero sin temperaturas demasiado altas.

Es un clásico de configuraciones lluviosas de oeste y suroeste, con vientos ábregos, que las temperaturas se sitúen en valores muy suaves y con muy poca amplitud térmica entre el día y la noche, con mínimas de 16/18ºC y máximas que, como mucho, alcanzan los 20/22ºC.

Por lo tanto, tocará seguir esperando algo más para volver a ver llover de manera generalizada en nuestro país, pero lo importante es que por fin parece que hay cierto consenso en una posible inestabilización generalizada a medio plazo.