Dimite el líder de Ciudadanos en Badajoz
25 de Marzo de 2015
Por Antonio Manzano Marchirant
Antonio Manzano Marchirant, ha enviado a los medios de comunicación una carta donde expone los motivos de su dimisión como portavoz de “Ciudadanos” Badajoz, después de tan solo dos meses de decidir entrar en la política activa municipal.
Envío a la Junta Directiva del partido “Ciudadanos” mi dimisión irrevocable como portavoz de “Ciudadanos Badajoz”, y mi renuncia a presentarme como candidato a la Alcaldía de Badajoz tal y como me habían ofrecido reiteradamente. Lo hago en base a los siguientes razonamientos:
Siempre he valorado a la Junta Directiva de “Ciudadanos Badajoz”, legalmente constituida, la cual está compuesta por personas honestas, de calidad y que no buscan nada en política, pretendiendo encontrar a las personas más preparadas para ir en las listas electorales y renunciando ellos a este derecho.
He condenado el comportamiento de dos personas, una de ellas perteneció a la Junta Directiva, quienes han traicionado a los compañeros de trabajo y han intentado hacerse ilícitamente con el control del partido mediante un golpe de mano, afiliando en el mismo a sus familiares, amigos, conocidos... con la intención de salir ellos en las listas en unas posibles Primarias para concurrir a las elecciones. Actitud que tanto la Directiva como yo mismo no estamos dispuestos a imitar por ir contra toda ética.
Denunciadas estas afiliaciones masivas y fraudulentas ante la central del partido en Barcelona, ésta decidió revocarlas, la misma directiva que una semana después decide hacer todo lo contrario, creer a los afiliados revocados y destituir ahora a la Junta Directiva.
El pasado sábado por la noche me llamó el recién nombrado Delegado Territorial en Extremadura para ofrecerme hacer caso omiso a la Junta Directiva, tomar yo las decisiones y pactar conmigo las listas electorales de Badajoz, donde yo iría de número 1, la persona de mi máxima confianza de número 2, y me imponían a un expedientado por el partido de número 3.
Lógicamente, por ética y por mis convicciones personales, me negué por tres motivos: porque no pienso traicionar a una Junta Directiva que siempre ha sido leal y limpia; porque yo no puedo pedir el voto a los ciudadanos para que confíen el alguien en quien yo no confío; y porque todas las cosas tienen un cauce, yo no tengo atribuciones para tomar tales decisiones, me lo pida quien me lo pida, y no se puede puentear a la Directiva, ni pactar, ni medrar a sus espaldas y a las de los afiliados, como estaba haciendo el Delegado Territorial.
Además, cargó sobre mi decisión la responsabilidad de que si no aceptaba el acuerdo propuesto por él y por Barcelona, posiblemente Ciudadanos no se presentaría en toda Extremadura. Presión que, lógicamente, no me hizo cambiar de opinión.
Tras dos meses en un nuevo partido, que no me parece nada serio, he comprobado que en política los sinvergüenzas siempre acaban por echar a las personas decentes, por eso la política está como está.
Yo no puedo engañar a los pacenses, que en las encuestas me han dado su confianza, por lo que nunca aceptaré ir en una lista, aunque yo sea el número 1, donde hay personas que no son limpias y van buscando colocarse en un puesto, pues no son merecedores de la confianza de los ciudadanos.
Nunca me hubiese importando presentarme a unas Elecciones Primarias como candidato a la Alcaldía de Badajoz, pero a unas elecciones limpias y transparentes, no a una “charlotada familiar”, que es en lo que algunos querían convertirlas.
Manzano ha manifestado que Albert Rivera es un magnífico líder, pero creo sinceramente que detrás de él no hay nadie. Ciudadanos me ha demostrado que cualquier partido nacional es más de lo mismo, primero están los intereses de partido, los pactos, las traiciones y las componendas, y después los ciudadanos.
A mí nadie me va a imponer lo que tengo que hacer o que decir para defender a mi ciudad. Mis declaraciones en contra del Estatuto de Capitalidad, que perjudica seriamente a Badajoz, han sido utilizadas malintencionadamente por las agrupaciones de Ciudadanos de Mérida, Plasencia y Cáceres para llevarlas a Barcelona en mi contra. Me da igual, pero yo sí tengo muy claras mis prioridades, primero están los ciudadanos y los intereses de mi ciudad y no los del partido a nivel regional o nacional.
Mientras Ciudadanos en Badajoz estaba trabajando para elaborar un proyecto de ciudad, las otras agrupaciones (Plasencia y Cáceres) estaban dedicadas a sus propios intereses personales en contra de Badajoz, supuestamente encabezadas por la de Plasencia, con cuya líder, alguien de Ciudadanos tenía un pacto para presentarse a la presidencia de la Junta de Extremadura. A mí nadie me va a imponer desde Cáceres la lista para presentarme al Ayuntamiento de Badajoz.
La realidad es que atacan a la ciudad donde Ciudadanos, según los sondeos a las elecciones municipales, tiene una intención de voto del 8,3% con casi tres concejales y su portavoz, y hasta ahora posible candidato, es el tercer político mejor valorado y el cuarto más conocido, y eso con sólo 2 meses de vida del partido en la ciudad.
Frente a ello deciden apoyar a Cáceres, nombrando allí al Delegado Territorial, donde sólo sacan un 4% de intención de voto y ningún concejal y a Plasencia, donde proponen a su candidata a la Alcaldía para la Presidencia de la Junta de Extremadura, a pesar de sacar, tras casi 20 años en la política municipal, menos votos y no sabemos si un concejal. Flaco bagaje para una líder, que llegó al Ayuntamiento por el PP, se pasó como transfuga al PSOE, fundó después su propio partido y ahora se pasa a Ciudadanos.
Nada he encontrado en Ciudadanos de la regeneración política que propugnan y mucho menos de transparencia, pues todo son presiones, acuerdos bajo la mesa, pactos e imposiciones.
Para enviar cualquier nota de prensa sobre un tema de Badajoz hay que enviarla primero a Barcelona, donde la mutilan o le quitan la chispa, sin conocer ni siquiera la realidad de la ciudad, y también en periodo electoral hay que enviarla a Plasencia para su revisión regional,...
Es una verdadera pena que un proyecto nuevo como es “Ciudadanos”, que ha ilusionado a muchos españoles, donde en Badajoz tenemos ya elaborado un proyecto de ciudad y contamos con un equipo de trabajo de personas jóvenes, limpias y altamente cualificadas y donde podíamos haber llegado a un 20% de los votos (algunas encuestas ya nos daban un 14%) lo que supondría la cifra más alta de toda España, se vaya al garete porque la carcoma ya ha entrado en este partido, procedente habitualmente de otros donde fueron rebotados, infección letal que en poco tiempo acabará por convertir a Ciudadanos en un partido tan corrompido como los demás.
Por todo ello, considero que es imposible trabajar en favor de la ciudad de Badajoz en estas condiciones y desde este partido, y presento mi dimisión irrevocable ante la Junta Directiva.
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