Educación crea 45 plazas de ATE cuidador para "garantizar la estabilidad"

La Junta de Extremadura crea 45 plazas de Auxiliar Técnico Educativo (ATE)-Cuidador y 3 plazas de Intérpretes de Lenguaje de Signos, que incluirá en la Relación de Puestos de Trabajo (RPT) de la Consejería de Educación, Ciencia y Formación Profesional, para garantizar la estabilidad y eliminar la precariedad de los empleados públicos.

Así se ha acordado recientemente por unanimidad en la comisión negociadora para el personal laboral al servicio de la Junta de Extremadura, en la que estuvieron presentes las organizaciones sindicales más representativas en el ámbito de la Administración General de la Comunidad Autónoma de Extremadura, la Dirección General de la Función Pública y la Consejería de Educación, Ciencia y Formación Profesional con el objeto de atender la demanda de apoyo educativo al alumnado con necesidades educativas especiales.

Con la creación de estas plazas en la RPT, las mismas pasan a ser estructurales y pueden ser cubiertas, de manera provisional, mediante interinidad por vacante, hasta un período máximo de 3 años, en tanto no se produzca su cobertura, de manera definitiva, a través de los procedimientos reglamentariamente establecidos.

De esta forma, la Consejería tiene el firme compromiso de mejorar las condiciones laborales, garantizar la estabilidad y eliminar la precariedad de los empleados públicos; todo ello con escrupuloso respeto al ordenamiento jurídico y dentro de las disponibilidades presupuestarias en cada ejercicio.

Como ha venido sucediendo en años anteriores, desde que fuera recogido en el Decreto 16/2015, de 17 de febrero, la creación de estos puestos en la RPT conlleva el cumplimiento de las obligaciones derivadas de la Ley 4/2011, de 7 de marzo, de Educación de Extremadura en materia de atención al alumnado con necesidades educativas especiales, así como las sentencias recaídas en su momento avalando el carácter estructural de los puestos de trabajo.

El referido Decreto 16/2015, de 17 de febrero, formaliza que dichas creaciones respondan a puestos de naturaleza laboral discontinua, con una jornada de 30 horas semanales, lo que equivale al 80 % de la jornada semanal ordinaria.

Las necesidades inicialmente previstas para el curso 2023-2024 se han tenido que afrontar mediante contratos en régimen laboral temporal, a través de puestos extra-RPT, por contratos eventuales de circunstancias de la producción formalizados con el inicio del curso escolar. La actual normativa de aplicación a la contratación de estos profesionales, para poder atender la demanda educativa, sólo permitía que los contratos tuvieran una duración de 6 meses y por circunstancias de la producción.

En la citada reunión se adoptó, asimismo, el compromiso de caminar hacia un modelo estable para la contratación de estos profesionales, que garantice la prestación de estos servicios de la manera más adecuada a los usuarios y evitar así las incidencias e inconvenientes que el actual sistema viene provocando.