El SES se prepara para reducir la incidencia de la gripe en Extremadura

La tasa de mortalidad por el virus de la gripe en 2017 fue la más alta en los últimos años. Así lo ha detallado hoy el consejero de Sanidad, José María Vergeles, en rueda de prensa donde han presentado la Campaña de la Gripe 2018/2019.

En la temporada 2017/2018 se diagnosticaron 6.447 casos de gripe en Extremadura, una tasa baja en relación con años anteriores. Pero de este total, 205 personas fueron pacientes graves.

De estos pacientes graves, el 88% tenían factores de riesgo alto y tan solo el 31% estaban vacunados, por lo que el consejero ha insistido en la necesidad de la vacunación como medida preventiva. De estas 205 personas, 38 fallecieron. 

Esta vacuna, según Vergeles, evita unos 40.000 casos de contagio del virus de la gripe al año en Extremadura. La vacuna debe ponerse entre 10 y 15 días antes de los picos de máximo contagio de este virus que se sitúan a finales de noviembre y a finales de enero.

Para la campaña de vacunación de la gripe 2018/2019, la Consejería de Sanidad ha adquirido 219.500 dosis las cuales se dividirán en dos lotes. Para ello se ha invertido cerca de 850.000 euros.

Esta campaña comenzará el próximo 22 de octubre y durará hasta el 7 de diciembre y está dirigida a personas mayores de 60 años y menores de 60 años que tengan factores de riesgos.

Estos factores de riesgo se refieren a personas con enfermedades crónicas como puede ser la insuficiencia renal, alteraciones de la sangre, ausencia de órganos como el bazo, personas que tomen tratamiento para la disminución de las defensas, que padezcan cáncer, jóvenes o niños con tratamientos de aspirina de larga duración, embarazadas…

También la consejería aconseja vacunarse a personas que puedan transmitir la gripe, como son los trabajadores de los centros médicos o las residencias de ancianos, o alumnos que realicen prácticas en estos centros, así como bomberos o miembros de las fuerzas y cuerpos de seguridad.

OBJETIVO

El objetivo de la Junta es poder vacunar al 65% de la población mayor de 60 años y al 40% de los profesionales sanitarios.

Vergeles indica que aún es pronto para hacer un pronóstico de la incidencia de este virus para este invierno, pero explica que la climatología influye de forma notable en su propagación. “Se da sobre todo en ambientes fríos y secos”, apunta.

Así, señala que en años anteriores el SES se planteó retrasar la campaña de vacunación debido a que las altas temperaturas se alargaron. Igualmente cree que este año, viendo las previsiones meteorológicas, el virus tendrá sus puntos de máxima concentración en la fecha estimada.