Un emeritense gana el premio Mejor Degustación en el MMAPE 2019

El emeritense Daniel Sarabia se ha proclamado con el premio a la Mejor Degustación en el concurso Mejor Maestro Artesano Pastelero de España, organizado por la Confederación Española de Empresarios Artesanos de Pastelería.

Este joven de 34 años creció entre dulces y lleva más de 15 años desarrollando su profesión en el negocio familiar, la Pastelería Marquesa de Pinares de Mérida, la cual abrió sus puertas en 1989.

En 2015, Daniel decidió embarcarse en una nueva aventura. Para ello viajó hasta Alicante donde comenzó a estudiar en la Escuela Profesional de Pastelería y Repostería del famoso maestro pastelero Paco Torreblanca. Fue allí donde su visión hacia esta profesión cambio por completo.

“Allí dejé de ver la pastelería como una profesión para verla como un arte. Comencé a darme cuenta de que todo influye a la hora de elaborar un pastel: tu estado de ánimo, tu cansancio, el entorno laboral… Es decir, entendí que no se trataba de hacer simplemente pasteles, sino obras de arte”, explicaba ante los micros de 7Días el pasado mes de julio.

Sin duda, el paso por esta escuela supuso un gran impulso a su carrera profesional, que junto a su día a día en la pastelería, han conseguido que Daniel se proclame como Mejor Degustación en el MMAPE 2019.

Volvemos a entrevistarle tras esta experiencia y asegura sentirse “muy bien”. Explica que ninguno de los aspirantes han llegado a la media de corte para ser Mejor Maestro Artesano Pastelero de España, por lo que la organización decidió crear dos premios, uno como Mejor Degustación, para Daniel Sarabia, y otro a la Mejor Escultura, para un pastelero murciano.

Cabe señalar que el concurso se trataba de elaborar una escultura, una tarta, milhojas, bombón de corte y bombón de molde, además de un pastel de viaje.

Ahora Daniel se encuentra con fuerzas para volver a presentar la candidatura para la próxima edición. “Cuando salí del concurso acabé cansado y no pensaba en volver a presentar, pero hoy me veo con más fuerza”, apunta. En este sentido indica que se ha tratado de una experiencia “muy exigente” pero “muy bonita” en la que ha podido conocer a mucha gente del gremio con la que ha creado una amistad “muy bonita”.

Ayuda a esto que la puntuación sea a la francesa, es decir, no se requería un único ganador, sino que podían ser uno, dos, tres… o incluso ninguno, como ha ocurrido en este caso, por lo que se han creado dos premios paralelos.

El pastelero emeritense señala que esta experiencia se suma a su trabajo diario y que ahora se propone “seguir evolucionando” y “avanzando” aunque “es lo que hago en mi día a día”.

Este concurso se ha celebrado durante este fin de semana, 23 y 24 de febrero, en el marco de Interiscop (IFEMA-Madrid).