Nuevos casos de botulismo por ingesta de tortilla de patatas
Desde que se conociera la alerta hasta el momento se han notificado siete casos con un antecedente de consumo de tortilla de patatas envasada consumida en España, de distintas marcas, pero mismo productor. Se trata de la marca riojana Palacios.
Los primeros casos detectados fueron dos personas italianas, que, en una estancia en Valladolid, consumieron la tortilla, son padre e hija y tienen 23 y 61 años respectivamente.
Los otros tres confirmados son españoles residentes en Madrid, Galicia y Asturias, y tienen 43, 49, y 50 años. Estos tres casos han requerido ingreso en UCI. Además, hay otros dos casos probables, de la Comunidad Valenciana y Andalucía, de 49 y 27 años.
Afortundamemente no ha habido ningún fallecido entre los casos asociados.
Marcas blancas de Palacios
El comunicado que ha emitido el Grupo Palacios solicitaba “a todos aquellos que hayan adquirido uno de estos productos que se abstuvieran de consumirlo y procedieran a su devolución al punto de venta en el que lo adquirieron, donde será reembolsado su importe”.
La empresa riojana Palacios opera bajo las siguientes marcas blancas además de la propia:
Auchan (de supermercados Alcampo).
Alipende (de supermercados Ahorramás).
Chef Select (de supermercados Lidl).
Carrefour.
Condis.
Consum.
DIA.
El Corte Inglés.
Eroski
Unide.
Rikissimo.
Supermercados del Grupo IFA.
¿En qué consiste el botulismo por intoxicación alimentaria?
El botulismo de transmisión alimentaria es una enfermedad grave y puede ser mortal. Es una intoxicación causada generalmente por la ingesta de alimentos contaminados con toxinas botulínicas. De persona a persona no se transmite el botulismo.
Síntomas del botulismo por transmisión alimentaria
Las toxinas botulínicas son neurotóxicas, lo cual significa que afectan al sistema nervioso. El botulismo de transmisión alimentaria se caracteriza por una parálisis flácida descendente que puede producir insuficiencia respiratoria.
Los síntomas iniciales incluyen fatiga intensa, debilidad y vértigo, seguidos generalmente por visión borrosa, sequedad de boca y dificultad para tragar y hablar. También pueden concurrir vómitos, diarrea, constipación e inflamación abdominal. La enfermedad puede dar lugar a debilidad en el cuello y los brazos, y afectar posteriormente los músculos respiratorios y los músculos de la parte inferior del cuerpo.
Los síntomas por lo general se manifiestan entre 12 y 36 horas después de la ingesta (con un plazo mínimo de cuatro horas y un máximo de ocho días). La incidencia del botulismo es baja, pero la tasa de mortalidad es alta si no se realiza un diagnóstico precoz y se dispensa sin dilación el tratamiento adecuado que es la pronta administración de antitoxina y atención respiratoria intensiva).