Un 22% de los niños extremeños padece obesidad
La consejera de Salud y Servicios Sociales, Sara García Espada, reconocía este pasado viernes la preocupación de las administraciones sanitarias por la alta incidencia de la obesidad que se asocia a enfermedades no transmisibles como la diabetes tipo 2, la hipertensión arterial, niveles anormales de colesterol, enfermedades cardiovasculares y cáncer.
García Espada durante la inauguración de la jornada sobre el Programa de Educación para la Salud frente a la Obesidad Infantil y Juvenil, indicó que “la obesidad debe abordarse desde una perspectiva de salud y no desde el punto de vista estético" y esto, en su opinión, "disminuye la autoestima de las personas, haciendo más difícil el camino para lograr perder peso".
La consejera explicó que los colegios desempeñan un papel esencial en la promoción de buenos hábitos de salud y por ello, "es tan importante esta actividad basada en la educación para la salud frente a la obesidad infantil y juvenil".
García España recordó que cuando se inició la actividad en el año 2005, "el porcentaje de escolares extremeños con sobrepeso superaba la media española, mientras que ahora ha descendido hasta el 22 por ciento, frente al 30 por ciento de la media nacional". Aunque son datos favorables, ha insistido en que es importante que "sigamos incidiendo" y abordar la obesidad en las etapas tempranas para prevenir patologías de adulto, ya que "el porcentaje de adultos obesos en Extremadura supera la media nacional".
LA OBESIDAD ES UN PROBLEMA SOCIAL
La Organización Mundial de la Salud (OMS) reconoce que la salud mundial está transformándose y que las enfermedades no transmisibles están reemplazando a las transmisibles en número de casos y en mortalidad. Estudios clínicos evidencian que el 46 por ciento de la mortalidad mundial guarda relación con problemas complejos derivados de aspectos tan simples como la dieta y el ejercicio.
Aunque en España no existen los niveles de prevalencia de obesidad de Estados Unidos, "nuestro país, indicaba García Espada, se encuentra entre los tres europeos con mayor obesidad infantil y el 7 por ciento del gasto sanitario global se destina a combatir este problema". En su opinión, la obesidad no es un problema de las personas que la sufren, sino del conjunto de la sociedad, lo que implica que "debemos abordar el problema como una estrategia de salud pública en la que debe primar la prevención".