OPINIÓN: “La alternativa o utopía extremeña para Extremadura”

Por primera vez en estos años de democracia se va a presentar una alternativa a los dos partidos que nos han gobernado durante más de 40 años, tanto a nivel nacional como autonómico.

La experiencia de estos 43 años, para Extremadura, ha sido nefasta. Son 40 años esperando que se cumplan las promesas más elementales de igualdad entre todos los españoles. Seguimos a la cola, año tras año, a pesar de que los extremeños han apoyado a todos los gobiernos.

Nuestros votos han servido para mantener a Extremadura en el último lugar del desarrollo y parece clara la amenaza de seguir así, con las mismas promesas incumplidas durante otros 40 años. Los votos extremeños contra Extremadura.

Ante esta desgracia social y política, varios partidos extremeños han tratado de analizar las razones por las que Extremadura está a la cola del desarrollo y sin esperanzas de cambiar.

El paso que supondrá la unión de los extremeños, de forma solidaria, para defenderse, será un paso de gigantes. Nunca habíamos intentado que los extremeños tuvieran que buscar su defensa en sus propias fuerzas, que estaban sirviendo a intereses contrarios a los de Extremadura.

Está en nuestras manos el cambio, no es una utopía como ir a Marte, solo falta que pase por nuestras cabezas.

La coalición de partidos y plataformas extremeña tiene como principios fundamentales:

1.- La defensa solidaria de Extremadura en todas y cada una de sus partes.

2.- La coalición es inclusiva de todos los extremeños que sientan la necesidad de defender solidariamente los intereses de Extremadura. Las posibles diferencias son superables por el interés de todos en nuestro desarrollo integral.

3.- Las opciones distintas enriquecen nuestra realidad como extremeños. Las diferencias son complementarias y no excluyentes. Todo lo que se puede sumar está dentro de lo cuantitativo y tiene entre sí una cierta homogeneidad.

4.- Como ejemplos visibles, tenemos a los socialistas alemanes, unidos durante más de 20 años, con el partido CDU, de derechas. Siguen juntos, ahora encabezando el partido socialista.

Como caso especial, el partido comunista de China se ha “fusionado” con el capitalismo más radical. Por la oposición a muerte de capitalismo y comunismo ha habido guerras y muchos millones de personas muertas. Juntos, China ha conseguido su mayor progreso.

No es que sean un modelo para nosotros, pero sí un motivo de reflexión para superar nuestras pequeñas diferencias.

5.- Todos somos necesarios, todos, para sacar a Extremadura de esa jaula en que la ingeniería política la tiene encerrada. Aunque parezca mentira, no somos libres, ni autónomos de hecho. Estamos en una simulación, en una apariencia bien montada y difícil de detectar. Nuestros diputados y senadores no son libres para votar por su tierra.

6.- Esta decisión de los regionalistas en Extremadura no es un capricho de nadie. Es la necesidad de defendernos solidariamente y defender nuestro desarrollo frente al abandono y saqueo histórico de Extremadura.

7.- Nuestros representantes no nos representan. No pueden representarnos ni defendernos en las Cortes, ni en Extremadura, porque ellos mismos no son libres. La disciplina de partidos es nuestro peor enemigo. Anula a los que elige el pueblo y tienen que obedecer a intereses, a veces, contrarios a Extremadura y a la Constitución.

8.- ¿Por qué estamos así?

Porque los gobiernos sucesivos “CON UNA MANO NOS DAN Y CON OTRA NOS LO QUITAN”, como decía el ministro socialista Ábalos, “Y ASÍ DURANTE DÉCADAS”.

9.- El engaño del voto.

Aparentemente, todos podemos votar con libertad; pero el voto de los extremeños, una vez “dado”, se pierde. Es como darle nuestra cuenta corriente para que la administre libremente un enemigo. Los intereses de los gobiernos y de los partidos no están en Extremadura. Extremadura es, para ellos, como una colonia con cuyos votos ya cuentan sin necesidad de consultarnos.

10.- ¿No es igual para todos?

No, absolutamente no. El voto de los extremeños no cuenta para Extremadura. Está en las arcas de los partidos, o del Gobierno, y los usan para contentar a los díscolos, a los que amenazan con el separatismo o con golpes de Estado. Los gobiernos sucesivos, de izquierdas y de derechas, han tenido el mismo comportamiento con Extremadura. Han gobernado para dos comunidades que les chantajean y les exigen privilegios y prebendas. Nuestra voluntad política queda secuestrada en manos del Gobierno o de los partidos.

11.- Extremadura, después de votar, queda en la mayor pobreza política. Después de que el voto entra en la caja fuerte del Gobierno o de los partidos, Extremadura queda indefensa, sin voz y sin voto real. Después de esto, “a pedir”.

12.- Pretendemos que la voluntad de los extremeños sirva para Extremadura y no contra ella. Esto solo lo conseguiremos si nos damos cuenta de nuestra situación y nos unimos, por encima de diferencias salvables o de egoísmos personales.

13.- No pretendemos privilegios ni prebenda alguna. Pretendemos la justicia igual para todos y los medios de desarrollo y de bienestar similares para todos.

14.- Necesitamos un poder extremeño solidario porque tener la razón no basta. Tenemos que tener el poder para exigir la justicia y la verdad.