‘Somos Cáceres’ cree muy necesario un centro social habitacional para la ciudad

Desde ‘Somos Cáceres’ han valorado positivamente el acuerdo para la firma de un protocolo de atención a personas sin hogar, entre el Instituto Municipal de Asuntos Sociales y diversas organizaciones con amplia experiencia en la atención a estas personas en situación de extrema vulnerabilidad social.

Sin embargo, consideran que el Ayuntamiento de Cáceres debería tener más peso específico en este tipo de actuaciones. Junto con el desempleo, la falta de techo es el mayor de los problemas que tienen estas personas, pero no el único. Derivado de lo anterior, también es frecuente que estas personas sin hogar presenten problemas de salud mental que son necesarios atender.

“Por ello, consideramos que es imprescindible una profesionalización de la atención que reciben estas personas, para que esta ayuda no se limite a dotarlas de alimentos y un techo, sino que llegue de una manera integral, actuando sobre todo el espectro de necesidades que puedan presentar los cacereños sin techo”, comenta Óscar Pérez desde Somos Cáceres.

Esta coalición política propone que se habilite el antiguo Edificio de Bienestar Social de la calle Reyes Huertas como centro de atención integral para personas sin hogar y se dote de profesionales capaces de reconducir y guiar a los futuros usuarios en su camino de vuelta a la reinserción social, si ese es su deseo.

En estos casos consideran que la salud mental es la asignatura pendiente, a pesar de ser un factor decisivo a la hora de alcanzar la plena reinserción social de las personas. Por ello, “además de la ayuda social prestada, se acabaría con el deplorable estado de abandono que presenta el inmueble y que ha sido motivo de múltiples quejas por parte de los vecinos de la zona. También generaría puestos de trabajo en una ciudad tan castigada por el paro como la nuestra”.

“Consideramos que Cáceres tiene capacidad suficiente para que ninguna persona se vea en la necesidad de dormir en sus calles bajo las inclemencias del tiempo y otros peligros”, concluye Óscar Pérez.