Aumentan los diagnósticos de VIH en personas de entre 25 y 34 años en España
El 1 de diciembre fue proclamado por la Organización Mundial de la Salud (OMS) como el Día Mundial del VIH.
Numerosas instituciones públicas iluminan sus instalaciones y ayuntamientos con la característica luz roja que conmemora la lucha contra esta enfermedad.
En España existen entre 130.000 y 160.000 personas que padecen VIH. Han pasado los años, y a pesar de los avances en diagnóstico, así como en el tratamiento, este virus sigue siendo una cuestión de Salud Pública de alto grado. La importancía del diagnóstico temprano es vital para la implatanción de tratamientos y frenar los contagios.
Pese a todo, incluidos los avances, la enfermedad continúa siendo un tema tabú en la sociedad, con estigmas arraigados que impiden hablar abiertamente de ella.
A pesar de que el último informe sobre nuevos casos de VIH muestra una tendencia descendente en España, continúa la preocupación por la transmisión. Sobre todo, los diagnósticos tardíos, y la mayor vulnerabilidad de algunos colectivos de personas, acrecentan el problema.
La vía de transmisión predominante continúa siendo la sexual, con una mayor incidencia entre hombres que tienen sexo con hombres (55 %). Las drogas inyectables son otro de los problemas clave, ya que, todavía, parte de los casos se transmiten en este tipo de situaciones. Por edades, la preocupación es notoria en la franja de 25 a 34 años, que aglutina el 33,5 % de los nuevos diagnósticos.
En relación a los diagnósticos tardíos estos son más comunes a medida que avanzan las franjas de edad y en las relaciones heterosexuales.
La prevención y el diagnóstico son claves para frenar los casos de VIH, algo que debe ser una cuestión de concienciación social entre toda la población.