A Soledad Giménez

 

Enmudezcan los cencerros, quiten campanillas,

Cesen los mugidos de los becerros y los balidos de los corderos,

Que ha muerto Soledad

 

Que no crezca la siembra,

Que las gallinas no pongan huevos,

Que los cochinos no gruñan,

Que los gatos no maúllen

Que ha muerto Soledad,

 

Que la niebla llene los campos,

Que no se vea la grandeza de la dehesa,

Que los perros del cortijo no ladren,

Que los pájaros no canten

Que ha muerto Soledad.

 

Que los monteros hoy no cacen y que se suspenda la montería,

Que los acuerdos se aplacen,

Que cese la algarabía

Que las vacas avileñas sean más negras,

Que las vacas jardas sean más blanquinegras

Que ha muerto soledad.

 

Que lo comuniquen en la sierra, que repliquen las campanas en Gredos,

Que se queden sin hojas los pinares y robledos,

Que el cielo por el día sea de color plomizo,

Y por la tarde se tiña de sangre, de color rojizo.

 

Con nostalgia la recuerdo,

Ella era todo alegría

La lengua me muerdo, ella de esto que pensaría…

No, sin duda que esto no le gustaría

De actuar con tristeza que diría,

¿Cómo se comportaría?

 

Que en la sierra cacen los monteros,

Que en la dehesa trabajen los ganaderos,

Que tras las ovejas marchen los pastores

Y en el monte se alegren los cazadores.

 

Que recen al cielo. que su alma encomienden

Que las buenas obras en la tierra trascienden

Por tanto, que en el cortijo ladren los perros,

Que en las vacas suenen los cencerros,

 

Que se despeje la niebla que salga el sol, que brille,

Que también el gran jabalí en el monte humille,

Que correteen los corderos, que balen las ovejas

Que marchen los vaqueros, que zumben las abejas

 

Recordarla con alegría que mucha gente la quería

A pesar que alguno sin duda la envidiaría

Que en este trance solos no hemos estado,

Que buenos amigos nos han acompañado

 

Cuantas llamadas, cuantos abrazos,

Cuantos cariños, con el corazón hecho pedazos.

Sonriamos, rindámosla un último tributo

Que hoy, a pesar de mi tristeza con nadie discuto,

 

Se ha ido una gran señora, gran madre y gran esposa

Mujer encantadora, que a todos nos cuadre que era maravillosa

 

PD: solo algunos comprenderán el porqué de recordarla con esta canción “Save the last dance for me