Europa acelera el lanzamiento del euro digital: así cambiará nuestra forma de pagar
La Unión Europea avanza a paso firme hacia la creación del euro digital, una versión virtual de la moneda común que convivirá con el efectivo pero adaptada a las necesidades del siglo XXI. Impulsado por el Banco Central Europeo (BCE), este nuevo instrumento busca ofrecer una forma de pago pública, segura y accesible en el entorno digital, donde hoy reinan gigantes como PayPal, Apple Pay o Bizum.
El euro digital no será una criptomoneda como el Bitcoin ni estará pensado para la especulación. Al contrario: será una moneda digital emitida por el BCE y respaldada por la misma garantía que el euro físico. Permitirá realizar pagos instantáneos, sin necesidad de intermediarios privados y con la máxima protección de los datos personales. El ciudadano podrá usarlo a través de apps o tarjetas, incluso sin conexión a internet.
¿Por qué tanta prisa? Europa no quiere quedarse atrás frente a potencias como China o Estados Unidos, que ya han lanzado o están probando sus propias monedas digitales. El yuan digital chino está en fase avanzada, mientras que la Reserva Federal estadounidense estudia el llamado "dólar digital". En un escenario de creciente digitalización financiera, Bruselas teme perder soberanía monetaria si los europeos dependen de plataformas extranjeras para algo tan básico como pagar.
Además, el euro digital es una herramienta clave para garantizar la inclusión financiera, especialmente en zonas rurales o entre personas sin acceso a cuentas bancarias. También reforzará la resiliencia del sistema financiero europeo frente a ciberataques, apagones tecnológicos o crisis bancarias, al permitir siempre una vía directa de pago respaldada por el BCE.
El proyecto se encuentra en fase de preparación técnica, pero la Comisión Europea ya ha presentado una propuesta legal y el BCE podría comenzar las pruebas piloto en 2026. Si todo va según lo previsto, el euro digital será una realidad antes del final de la década. Europa se prepara para un futuro donde el dinero no siempre se toca… pero sigue valiendo lo mismo.