OPINIÓN: ¿Debe Sánchez facilitar la investidura a Feijóo?
Mucho se está hablando estos días sobre si Sánchez debería o no facilitar la investidura de Núñez Feijóo. Y ante esto, tal vez, algunos, no hayan entendido nada.
España ya no es la España del bipartidismo dónde PSOE y PP se turnaban cada cuatro u ocho años en el poder. España ha cambiado, y parece ser que hay quien todavía no se haya dado cuenta de este detalle.
EL MOVIMIENTO 15M
El movimiento del 15M sentó las bases de ese cambio en el año 2011. En pleno gobierno de la segunda legislatura de Rodríguez Zapatero, cuando la crisis comenzaba a azotar al país, este movimiento ciudadano llenó de reivindicaciones las plazas más conocidas de las ciudades españolas. Todo comenzó en la Puerta del Sol, y así fue como Madrid inició esta revolución que continuó en todo el país.
Y a esos orígenes y a las asambleas que se organizaban en la Facultad de Ciencias Políticas de la Universidad Complutense de Madrid, puede atribuirse el nacimiento de Podemos. La entrada de la Facultad se convertía a diario en un “asentamiento”, en el que estudiantes y profesores intercambiaban posiciones. Y sí, tal vez Podemos también se fraguase en los despachos de la UCM, cuyos profesores titulares y asociados se convirtieron tiempo después en los dirigentes de la formación morada. Prueba de ello fue precisamente el nombramiento de Pablo Iglesias como candidato y el acompañamiento por parte de Bescansa, Monedero o Errejón, entre otros.
Por todos es sabido que esta formación ha perdido peso en el ámbito nacional en favor de Sumar, el partido que ha aglutinado a todos los partidos que están más a la izquierda del PSOE. Podemos ha renunciado a su marca, a su color e incluso a sus dirigentes. Lo han hecho con el claro convencimiento de frenar a la extrema derecha en pro de los derechos de los ciudadanos.
¿SERÍA POSIBLE UNA GRAN COALICIÓN ENTRE PSOE Y PP?
Algunas voces del Partido Popular están alentando a una gran coalición entre ambos partidos con el propósito de dejar fuera del gobierno a Sumar o a Vox. Este último es improbable que estuviese en cualquiera de los casos, ya que ni siquiera el PNV se sentará con Feijóo para ofrecerle su apoyo en una inviable investidura para el candidato popular.
Por parte del PP y otras fuentes cercanas al partido, están solicitando el acercamiento entre Sánchez y Feijóo. Olvidan ahora la gran cantidad de insultos que el presidente del gobierno ha tenido que soportar durante esta legislatura. Un presidente que llegó a la Moncloa gracias a una moción de censura apoyada por todos los partidos excepto por propio PP, Ciudadanos, Unión del Pueblo Navarro y Foro Asturias.
Los 180 votos que adquirió el PSOE no fueron sólo un apoyo a su candidato sino también el rechazo a la corrupción que asolaba al Partido Popular. Una trama conocida por todos y que fue decisiva para poner fin al mandato de Mariano Rajoy.
A quiénes alientan a una posible gran coalición, habrá que recordarles que España ya no es la España del bipartidismo, y que ahora el pastel se reparte entre más partes. La fragmentación del parlamento recoge el sentir de la ciudadanía. Una ciudadanía diversa, con ideas dispares, con ideologías diferentes y con sentimientos nacionalistas. Esto último es a día de hoy lo más controvertido, ya que dependiendo del territorio en el que preguntes, la balanza en favor o en contra del nacionalismo tornará hacia un lado u otro.