OPINIÓN: ¡No más disciplina de partido!

Hace apenas unos días vimos cómo cuatro diputados extremeños votaban en contra de su propia tierra por la llamada “disciplina de partido”. Este hecho no es la primera vez que ocurre y, lamentablemente, no será la última. Esta vez fue el PSOE y en otras ocasiones ha sido el PP quien lo ha hecho. Lo que no cambió fueron las consecuencias y los afectados, una Extremadura sin recursos y extremeños obligados a emigrar.

El ser pocos es sinónimo de importar poco. Este es el principal problema de nuestra tierra y por lo que la disciplina de partido siempre está en contra de Extremadura. Vemos cómo diputados de otras regiones no ejercen una disciplina de partido, sino disciplina hacia su tierra (PNV, Junt´s, ERC) pues caso de no hacerlo no volverían a pisar el Congreso. Al mismo tiempo vemos cómo los disputados extremeños miran a sus jefes de Madrid en lugar de a Extremadura (por su sustento) y justo ahí está el problema.

Es el lugar a donde se mira donde está el problema y, la vez, la solución. Los que miran por su tierra siguen y seguirán ahí y los que miran por sus jefes lo único que pretenden es tratar de subsistir ahí a toda costa, sin importarles quién y para qué les pusieron ahí. También vemos cómo esos políticos que miran por su tierra consiguen grandes réditos económicos y sociales, mientras nosotros no vemos ni el AVE, ni autovías, ni avances, y lo peor: dejamos de ver a nuestros hijos, ya que se tienen que marchar fuera de aquí por la falta de futuro y de oportunidades.

Una sociedad extremeña con muy pocos recursos no puede esperar eternamente. La urgencia de las demandas sociales exige que los partidos y sus representantes miren más allá de las fronteras internas de sus agrupaciones y pongan en el centro de sus actuaciones a Extremadura. Es hora de que la política deje de ser una cuestión de "disciplina de partido" y se convierta en una cuestión de "disciplina con la sociedad", una disciplina que sirva para cambiar las estructuras y crear un futuro más justo para todos.

¿Hasta cuándo vamos a tolerar que los intereses partidarios se antepongan a las necesidades más básicas de los extremeños?

El tiempo de la disciplina de partido SE ACABÓ. Es el momento de ser disciplinados y mirar “por lo de aquí”, es el momento de mirar por lo nuestro, de mirar por nuestros propios intereses y, sobre todo, de mirar por el futuro de nuestros hijos.