OPINIÓN: Siete y media
11 de Enero de 2022
No, no es una hora. Ni tan siquiera una talla de zapatillas . Es un juego de cartas en el que gana quien más cerca quede de esa cifra, de las siete y media.
Hay muchos tipos de jugadores. Están los que se plantan cuando están cerca para evitar el riesgo o los que buscan conseguir las siete y media a riesgo de pasarse y perder. Gloria o fracaso.
En este arranque de año no dejo de leer las mismas cosas que el año pasado con respecto a mi partido. Los medios regionales en su libertad que respeto y aliento cada día, nos afean en editoriales y artículos de opinión que aún no hemos celebrado el Congreso Regional del PP y que aún no hay candidato a las elecciones regionales del próximo año.
Así es, no se ha elegido. Los más de 30.000 afiliados del Partido Popular de Extremadura aún no hemos elegido o reelegido al Presidente del partido en la región cuando el PSOE lo ha hecho. Eso nos recuerdan muchos articulistas, que el PSOE ya lo ha hecho, los mismos que cuando en julio pasado mi partido acabó los Congresos Provinciales de unidad y de consenso mientras el PSOE no los había aún celebrado no escribían nada y que cuando los hizo y no fueron de consenso… tampoco compararon. Cuando ahora se nos critica, y se critica a la dirección nacional del Partido Popular porque el congreso Regional se está retrasando según ellos, no se hizo lo contrario cuando los provinciales fueron antes. No pido un trato favorable, pero quiero que se trate con igualdad temas que son iguales, como hace precisamente este medio, Extremadura 7 días.
El liderazgo de José Antonio Monago ha tenido muchas cosas positivas para nuestras siglas, que se convirtieron en ganadoras bajo su batuta, pero la mejor de ellas ha sido la independencia. Somos libres e independientes de todos y de todo. Y lo vamos a seguir siendo. Nadie nos va a marcar nuestro calendario, nadie nos va a elegir nuestros líderes, nadie va a decidir por nosotros.
Porque no elegimos nada menor. Elegimos al próximo Presidente o Presidenta de Extremadura, que no es poco. Si algo tengo claro es que quien sea nuestro próximo presidente Regional va a ser presidente de Extremadura y esa responsabilidad no se nos puede exigir que la asumamos con precipitación.
Frente a un Vara aburrido, cansado, triste, errático, casi hilarante, el Partido Popular va a elegir a quién le ganará en las próximas elecciones. Los extremeños no van a olvidar cómo durante estos años se está desmantelando todo aquello que dice proteger como es la sanidad, con una asistencia primaria y unas listas de espera cada vez más vergonzosas así como con unos recortes tanto en centros asistenciales como en ambulancias en entornos rurales que suponen el abandono del PSOE de todos esos valores que dicen defender.
Los extremeños no van a olvidar cómo miles de nuestros jóvenes se tienen que ir cada año a buscar trabajo fuera de la región para no volver porque aquí no hay oportunidades, porque no se convierte a nuestra región en un verdadero destino apetecible de inversiones, o no van a olvidar cómo se pliegan a Sánchez y aquí no habrá ni AVE, ni autovía a Levante, ni a Granada, ni a Huelva ni entre Cáceres y Badajoz. Todo es mentira. Los extremeños ya huyen de las mentiras de unos gobernantes que naufragan en esta pandemia engullidos por su orgullo y por su incapacidad para asumir los errores de verdad.
Frente a esto Extremadura tendrá un gran proyecto que liderará alguno de mis compañeros para hacer sentir entre todos a los extremeños qué es exactamente lo que necesitan para el futuro.
Por eso, no tenemos prisas. Pueden seguir con editoriales, artículos de opinión, pueden seguir algunos jugando a Pulitzer. Yo lo respeto y me gusta, porque genera la expectación lógica de quien sabe que elegimos al próximo presidente de Extremadura, al que tiene que pelear por nuestras infraestructuras, al que tiene que ponerse junto a nuestros agricultores y ganaderos a defender su medio de vida, quien tiene que liderar la transformación industrial de Extremadura y conseguir que nuestros jóvenes no se vayan a estudiar o trabajar y no vuelvan nunca.
Nuestra responsabilidad es tan grande que es como una apuesta a un siete y medio. No nos vale con un siete, pidamos carta y vamos a por todas. Extremadura lo merece y lo necesita.