ADENEX denuncia la “temeridad” de las propietarias de la central nuclear de Almaraz

La Asociación para la Defensa de la Naturaleza y los Recursos de Extremadura, ADENEX, ha denunciado que ha comenzado la parada obligatoria de la unidad I de la Central Nuclear de Almaraz a pesar de continuar en vigor el estado de alarma.

Estaba prevista para el pasado 15 de marzo, pero el Consejo de Seguridad Nuclear (CSN) autorizó aplazarla a abril toda vez transcurrida esta situación excepcional. Sin embargo, a pesar de que se ha prorrogado el estado de alarma, el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico ha considerado que la electricidad de este grupo (la central tiene dos reactores) es esencial en estos momentos donde la demanda ejecutiva ha bajado hasta el 15%.

“Tanto el CSN como el Ministerio prefieren correr el riesgo de una contaminación temible a parar la central hasta el fin del confinamiento”, puntualizan desde ADENEX.

“Lo más grave es que el CSN ha permitido realizar la parada sin atenerse a las debidas inspecciones, controles y ajustes de mantenimiento general no dejando que estas se puedan hacer más tarde”. La parada actual solo servirá para reponer el combustible gastado dado que, de no hacerlo en estas fechas, el reactor concernido se debería haber parado por seguridad.

“INTERESES DE LA JUNTA CON IBERDROLA”

Para ADENEX, es evidente que el CSN se ha plegado a los intereses económicos de Iberdrola, primer accionista de Almaraz que controla el 53 % del capital. Mientras tanto, “desde la Junta de Extremadura y el Ministerio de Transición Ecológica dan prioridad a Iberdrola en la instalación de energías renovables en Extremadura, una empresa que no tributa en la región y que es capaz de dejar sin agua a los regantes cacereños, como ocurrió el verano pasado con el embalse de Valdecañas”.

Además, Iberdrola es la empresa que gestiona el embalse de Alcántara, afectado gravemente por una planta invasora, y que desde ADENEX temen que tampoco se hará responsable de esta situación.

Por estos motivos, ADENEX exige más rigor en las decisiones técnicas de un CSN que debe velar ante todo por la seguridad nuclear y que ha accedido a esta parada a sabiendas de que se cambiará el combustible sin poder llevar a cabo las inspecciones vinculadas a su funcionamiento a plena potencia. Además, “han accedido a esta parada cuando en estas condiciones de confinamiento y reducción del consumo no es un servicio esencial, dado que producimos el doble de energía para el sistema eléctrico de la que consumimos”.

ADENEX denuncia que las nucleares siguen siendo unas privilegiadas con excepciones que pueden llegar a ser graves, y se preguntan qué más excepciones les concederán para poder alargar su funcionamiento hasta 2028.