Nuevos cambios en el etiquetado del vino para este 2024
8 de Enero de 2024
Los vinos, como el resto de las bebidas alcohólicas, no tenían obligación de presentar en su etiquetado la lista de ingredientes ni la información nutricional. Ahora una nueva normativa sí obliga al vino a incluir estas informaciones.
El etiquetado da información
El Reglamento 1169/2011 es la norma que regula el etiquetado de los alimentos, estableciendo las indicaciones que deben incorporar obligatoriamente todos los alimentos que se vendan en la Unión Europea. Entre las informaciones obligatorias destacan:
- la denominación del producto,
- el contenido neto,
- la lista de ingredientes,
- la información nutricional,
- la indicación de las sustancias alergénicas.
- la fecha de consumo.
Esta normativa, aunque de aplicación general, presentaba una serie de excepciones: por ejemplo, las bebidas con más de 1,2 % de alcohol, no estaban obligadas a indicar ni la lista de ingredientes ni la información nutricional. Desde hace años, OCU solicita que se eliminen esas excepciones y se incluya la lista de ingredientes y la información nutricional en la etiqueta de todos los alimentos y bebidas.
Información nutricional en los vinos: una mejora
Ahora la Unión Europea da un paso adelante, al obligar a que los vinos y vinos aromatizados indiquen la lista de ingredientes y la información nutricional. Sin embargo, abre la posibilidad a que esta información, en lugar de ponerse de forma explícita en la etiqueta del vino, quede accesible a través de un código QR, en este caso, la única obligación para el fabricante es indicar en la etiqueta las Kcal por 100 ml, y la lista de alérgenos (que ya era obligatoria con anterioridad).
La nueva normativa fue aprobada el pasado 8 de diciembre, pero hay un periodo de transición de dos años para que los fabricantes adapten su etiquetado a las nuevas normas.
OCU considera que QR no es la solución
Para OCU, el acceso a la información obligatoria a través de códigos QR “supone una barrera física, tecnológica y económica que la Unión Europea no debiera permitir”. Por ello, insisten en que “tras los dos años de transición, la información que ofrezcan las botellas de vino sea completa y fácilmente accesible, que se incluya en las etiquetas toda la información necesaria y se recurra a los QR únicamente para proporcionar información adicional, como notas de cata, maridajes, etc., que pueden valorar los usuarios que estén interesados”.
Noticias relacionadas
Comenta esta noticia
A Fondo