Condenado por prevaricación el alcalde socialista de Torrejón el Rubio (Cáceres)

El Juzgado de los Penal número 1 de Plasencia, en una sentencia dictada el 22 de febrero de 2017, ha condenado Luis Miguel Vacas Blanco, alcalde socialista de Torrejón el Rubio, “como autor criminalmente responsable de un delito continuado de prevaricación administrativa, previsto en el art. 404 del código penal”.

Le imponen “la pena de nueve años de inhabilitación especial para empleo o cargo público representativo y/o electivo tanto a nivel local (alcalde o concejal), como provincial, autonómico, estatal o supranacional, debiendo el acusado quedar excluido de todo proceso electoral en los ámbitos indicados”.

En la sentencia, el magistrado concluye que el señor Vacas “prevaliéndose de la condición de alcalde de la corporación local, el día 28 de mayo de 2009 dictó decreto de Alcaldía convocando un proceso selectivo para la contratación laboral temporal de ocho trabajadores” redactando unas “bases del concurso, con la baremación de los diversos méritos, entre los cuales incluyó la de llevar más de un año inscrito como demandante de empleo”.

“El alcalde, aunque conocía sobradamente el deber de abstención que le incumbía, al amparo del art. 28.2 Ley 30/1.992, de 26 de noviembre, LRJAP y PAC, al participar su hijo en dicho concurso, no sólo no se abstuvo de redactar las bases, sino que, con la excusa de que la Instrucción del Servicio Extremeño de Empleo (SEXPE) sobre el proceso de selección del Plan Extraordinario de Apoyo al Empleo Local, de 21 de mayo de 2009, en su punto séptimo, procedió a establecer un criterio de baremación que primara dicha situación de llevar sin empleo más de un año así como de figurar inscrito en el SEXPE con la inequívoca voluntad de beneficiar a su hijo, con la finalidad de que éste obtuviera en todo caso una de dichas plazas”.

En la sentencia queda patente que “aunque el alcalde no formara parte del Tribunal, con la actuación descrita consiguió que, mediante la aplicación aritmética de los criterios y méritos contenidos en la base octava de la resolución dictada por él mismo, y la puntuación otorgada a cada uno de ellos, su hijo obtuviera una de las 8 plazas ofertadas, siendo además dicho aspirante el que consiguió la puntuación más alta.”

Esta conducta, según el magistrado, no es aislada dado que el día 27 de julio, apenas dos meses antes del caso anterior “el alcalde dictó nuevamente decreto de Alcaldía convocando un proceso selectivo para la contratación de un conserje para el colegio público de la localidad”.

Igualmente, “pese al reciente precedente en el concurso convocado el día 28 de mayo de 2009, soslayó nuevamente su deber de abstención pese a conocer que su esposa aspiraría a dicha plaza. Igualmente, la redacción de las bases para aspirar a dicha plaza fueron redactadas con la intención inequívoca de colocar a su esposa, introduciendo las siguientes modificaciones respecto de los criterios empleados en anteriores concursos a la misma plaza: desaparición de la entrevista personal con los aspirantes (anteriormente puntuada con 10 puntos); se puntúa menos la circunstancia de no haber trabajado nunca en el ayuntamiento, pasándose de 1,50 a 1 o 1,25 puntos; por hijo menor de edad a cargo, se reducen puntos de 1,50 a 0,60 puntos, por tres hijos en total; se agrega en el actual, nuevo mérito por no percibir prestación: 1 punto”.

Por su parte, el acusado suprimió de las bases del proceso la entrevista personal “con el propósito de que el tribunal de selección en ningún caso tuviera herramientas de apreciación subjetiva que le permitieran elegir a uno u otro aspirante que no fuera su esposa, mediante la aplicación, estricta, de los criterios aritméticos establecidos en la convocatoria”.

A consecuencia de las modificaciones en las bases, su esposa consiguió ser la aspirante con mayor puntuación, al ser la única de las aspirantes que llevaba más de un año sin percibir prestación alguna por desempleo.

La sentencia concluye afirmando que “atendida la gravedad de la conducta del acusado, traducida en el desvalor de la acción y en el desvalor del resultado, se asume la petición de pena de ambas acusaciones de nueve años. Dicho desvalor se traduce en la actuación persistente del acusado en diversos procedimientos administrativos de selección, en la trascendencia de su conducta, en el favorecimiento de personas allegadas contraviniendo los principios de objetividad y transparencia que se predican de toda actuación administrativa, soslayando deberes básicos como el deber de abstención, y en la contumacia apreciada en su conducta pese a ser advertido del meritado deber por parte del Secretario Interventor”.

IU PIDE LA DIMISIÓN INMEDIATA

Una vez conocida la contundente sentencia, Joaquín Macías, coordinador general de IU Extremadura ha exigido “la inmediata dimisión de Luis Miguel Vacas como alcalde de Torrejón el Rubio” y ha pedido a Guillermo Fernández Vara y a Miguel Ángel Morales, secretarios generales del PSOE de Extremadura y Cáceres respectivamente, que “actúen con la misma contundencia que exigen a los demás partidos y cesen a Vacas”.

“Esta sentencia deja a las claras que se ha utilizado un cargo público para propio beneficio personal y eso es intolerable y debía sustanciarse en medidas políticas urgentes”, afirma Macías.

Para Macías nos encontramos ante “una espiral de hipocresía, dado que mientras exigen dimisión de concejales y alcaldes de otros partidos políticos, ellos no sólo han incumplido sus promesas dejando presentarse a esta persona como candidato a las elecciones municipales pese a tener pendiente un juicio oral, sino que han autorizado una moción de censura contra IU en esta localidad pese a conocer que el actual alcalde estaba pendiente de juicio”.

Macías ha destacado también “el importante papel de las acusaciones particulares como esta que hemos realizado desde IU Extremadura, ahora que están menoscabadas por parte de los partidos políticos que no tienen ningún interés en la lucha contra la corrupción”, ha concluido Macías.