Diego Hidalgo sobre Extremadura: "Le veo más futuro del que le ve otra gente"

El jurado de los Premios de la Asociación Española de Fundaciones (AEF) ha distinguido en su sexta edición a Diego Hidalgo Schnur, en la categoría de Iniciativa Filantrópica; a la Fundación Ayuda en Acción, en la categoría de Colaboración; a la Fundación CNSE en la categoría de Innovación Social; y a la Fundación por Causa en la categoría de Comunicación.

Con estos galardones la AEF reconoce a los filántropos y fundaciones españolas que mejor representan los valores del sector en el cumplimiento de los fines de interés general.

¿Cómo te sientes tras recibir este premio?

Siento la alegría sobre todo en mis hijos, en mi familia y en mis amigos, porque les hace mucha ilusión y eso me repercute. Me nombraron mejor Filántropo de Europa en 2008, mejor Filántropo del mundo de una década en 2011 y ahora en España, por fin. Ya sabes eso que dicen de que nadie es profeta en su tierra –bromea-, estoy muy contento.

¿Cuántas fundaciones has creado?

A lo largo de mi vida yo he creado ocho, solo o con otra persona. Son FRIDE (para las Relaciones Internacionales y el Diálogo Exterior), el Club de Madrid, Centro Internacional de Toledo para la Paz (CITPax), DARA, Educación para el Empleo (EFE), el Consejo Europeo de Relaciones Exteriores, esglobal y la Fundación Maimona.

Explícanos un poco más de ellas.

El Club de Madrid es una de las más importantes. Fue creado por Mijaíl Gorbachov, ex presidente de la Unión Soviética, y yo hace 20 años, una especie de asociación entre antiguos jefes de Estado y de Gobierno democráticamente elegidos que provienen de 70 países. Son unos 120 y se reúnen periódicamente, es una especie de Senado mundial. El secretario general de Naciones Unidas, que también es miembro, nos decía que nosotros podíamos conseguir aún más que las propias Naciones Unida.

Por otro lado fue en 2003 cuando me involucré en la Fundación DARA, cuyo objetivo es mejorar la eficacia de la cooperación al desarrollo evaluando la calidad de la ayuda a las poblaciones más vulnerables.

La EFE ofrece oportunidades a jóvenes del Norte de África y Oriente Medio y la edición española de la revista de relaciones internacionales, Foreign Policy -actualmente esglobal- aúna América Latina y Europa tratando de comunicar en español los problemas internacionales.

Sobre mis iniciativas destaco la creación y dotación de la Fundación Maimona, dedicada a promover el desarrollo local en Los Santos de Maimona y en Extremadura, y que ha estado a su vez en el origen de proyectos singulares como la Fundación Extremadura de Cine - Film Commission, la Fundación Centro Tecnológico Industrial de Extremadura, o su propio Centro de Empresas e Innovación.

¿Qué más destacarías de la Fundación Maimona?

El único mérito que me atribuyo es haberla creado y capitalizado. Yo acababa de salir a bolsa con mis participaciones en el grupo PRISA en el año 2000 y entonces dediqué 5 millones de euros a la Fundación para que no tuviera una vida corta. Ese es mi único mérito, porque lo importante fue contratar a una figura tan relevante como ha sido Alejandro Hernández después de 20 años.

Luego además crearon un patronato tremendamente entusiasta. Han dinamizado el pueblo creando empresas, un centro de mayores, una escuela de música, se enseñó a los mayores a usar las herramientas tecnológicas… sobre todo se movilizó a las asociaciones de la localidad. No hay más que ver que Los Santos de Maimona tenía unos 5.000 habitantes hace años y ahora llegan hasta los 9.000, así como la renta per cápita se ha elevado.

Diego, ¿cómo ves Extremadura desde tu posición?

Yo soy mucho más optimista con Extremadura de lo que generalmente se es, a pesar de que es una región olvidada, a pesar del tema del tren que es absolutamente necesario… La comunicación es fundamental, la gente tiene que llegar y las mercancías, por supuesto, y es verdad que el Gobierno Central olvida mucho la cuestión.

Los políticos hacen anuncios sobre optimista dando fechas. Y el Club Sénior Extremadura, donde hay gente muy cualificada en ese sector, cuando dicen 2025 ellos aseguran que será mínimo en 2035 haciendo un llamamiento a la realidad. El tren es muy importante.

Yo creo que es una región única, porque las dos provincias, Badajoz y Cáceres, tienen por ejemplo una conservación del medio ambiente fantástica y una dehesa que no la hay en otro sitio.

Considero que si el mundo se normaliza después de la pandemia y las crisis y salimos adelante, hay que saber que tenemos todo lo que no tienen las grandes potencias asiáticas, por ejemplo. Tenemos una densidad de población muy pequeña, buena cultura, la gastronomía, la historia…, la prosperidad de Extremadura vendrá cuando la gente la conozca más. Partimos de un punto muy bajo, pero le veo mucho más futuro del que le ve otra gente, tengo bastante optimismo.