El annus horribilis del Villanovense

El Club de Fútbol Villanovense comenzaba la temporada con la intención de repetir los éxitos de la anterior. Se había clasificado para la Copa del Rey mostrando un gran nivel de juego, muy del gusto de la parroquia serona.

Sin embargo con José Manuel Roca, el equipo de Villanueva de la Serena no tuvo su mejor comienzo coqueteando siempre con los puestos de descenso y sin aviso de reacción por parte de los jugadores.

Ante esta tesitura la junta directiva serona decidió rescindir el contrato de Roca. El elegido para sustituirle fue Julio Cobos, un entrenador que había llevado al Villanovense a jugar unos play off de ascenso a Segunda División.

Parece que Cobos había cambiado la cara al equipo y al final de 2018 lo posicionó en la decimocuarta posición con 21 puntos, parecían haberse olvidado de los puestos de descenso.

El Villanovense recibía el 2019 con toda la ilusión del mundo y mirando a cotas más altas. Querían volver a repetir la clasificación copera pero la realidad ha sido totalmente contraria.

Tras dos derrotas consecutivas, frente al Recreativo de Huelva y el Club Deportivo Badajoz, llegó una tímida reacción con dos empates y una victoria que le auparon a la decimotercera posición.

Fue un espejismo porque en los siguientes cinco partidos tan solo ha sumado dos puntos, llevándole a una peligrosa situación ocupando uno de los puestos de descenso directo.

El principal problema del cuadro de Julio Cobos ha sido la escasa puntería de cara a portería. En las 10 jornadas que se han disputado en 2019 tan solo han logrado cuatro goles y en seis de ellas no logró ningún tanto.

Si a ello sumamos que los rivales le hacen goles con facilidad, un total de 11 tantos en 10 encuentros, encuentras el principal motivo del por qué el Villanovense se encuentra en una situación tan delicada.

De los 30 puntos que podía haber sumado el conjunto serón en 2019 tan solo ha sumado siete, haciendo seis puntos en el coliseo villanovense. Mucho tendrá que remar para cambiar la situación.

Además el próximo fin de semana tiene una dura prueba. El duelo contra el Club Deportivo Don Benito, un club enrachado que lleva siete partidos sin conocer la derrota, será un enfrentamiento entre dos equipos que históricamente siempre se han tenido ganas.

Algo tiene que cambiar para que el Villanovense abandone esta tendencia que le esta hundiendo en la clasificación, por lo que Julio Cobos tiene un gran trabajo por delante.