El ciclismo femenino se pone en valor con un reto de 500 kilómetros y 8.000 metros de desnivel

El pasado 24 de agosto comenzó la segunda edición del reto Perimetrando Cáceres, que contó con la participación de un pelotón formado en su totalidad por ciclistas femeninas. Concretamente fueron 27 féminas las que completaron esta hazaña.

Con salida desde Plasencia, y durante cinco días, las ciclistas realizaron un recorrido de 500 kilómetros y 8.000 metros de desnivel positivo.

La primera parada fue en San Martín de Trevejo y en la segunda etapa llegaron a Hervás, tras recorrer 117 kilómetros y 1.650 metros de desnivel.

En la tercera etapa, quizás la más dura de todas, las ciclistas llegaron hasta la población de Jerte, tras subir dos puertos de grandes rampas como son el de Garganta la Olla y Cabezabellosa.

Ya en la cuarta etapa se subió el famoso puerto del Piornal, que este año albergará un final de la Vuelta Ciclista a España, para finalizar en Tejeda del Tiétar.

Después de hacer el final de La Vuelta, tan solo les quedaba una etapa, con destino a Plasencia, pero antes recorrieron la carretera que discurre por el interior del Parque Natural de Monfragüe.

Según las organizadoras, este reto ha supuesto unos “días de convivencia y de superación común, que sirven para dar visibilidad al ciclismo femenino, así como a los parajes inmejorables que tenemos en el norte de Extremadura”.