El picudo rojo llega a Don Benito y 600 palmeras se ven amenazadas

El Servicio de Parques y Jardines del Ayuntamiento de Don Benito ha detectado ejemplares de picudo rojo en las trampas instaladas en el extrarradio de la ciudad.

“Dado que hace tiempo contábamos con la posibilidad de que en algún momento pudieran llegar individuos de picudo rojo, habíamos instalado trampas con feromonas y trampas centinela”, detectando de esta forma en algunas de las ubicadas en el extrarradio de Don Benito la presencia de esta plaga; “lo que indica que ha llegado a nuestro entorno y que ya convive con nosotros, pudiendo atacar a las palmeras”, ha informado el concejal de Medio Ambiente, Juan Antonio Merino.

El picudo rojo es una plaga que afecta sólo a las palmeras, principalmente a las palmeras canarias (Phoenix Canariensis) y en menor medida a la palmera datilera (Phoenix Dactylifera), en muy raras ocasiones afecta a la Washingtonia, tanto la robusta como la pilífera.

En la localidad dombenitense existe un patrimonio considerable de palmeras: 58 de Dactylifera, 82 Canariensis y de Washingtonia, estimando un número de 600 unidades.

Según ha comentado Merino, una vez han sido capturados los ejemplares de picudo rojo, se ha procedido a la consulta al Servicio de Sanidad Vegetal de la Junta de Extremadura, confirmando la existencia de los mismos.

El Servicio de Parques y Jardines ha tomado las medidas de prevención correspondientes para proteger las palmeras, mediante tratamientos con Endo terapia y la aplicación de inyección con Imidacloprid, tratamiento que se está efectuando de manera preventiva, al no haber detectado síntomas de afección en ninguna palmera.

El concejal ha señalado que es aconsejable que los propietarios de palmeras ajenas a las municipales efectúen tratamientos preventivos, que en el caso de pocas unidades pueden hacerse con pulverización con materias activas como Imidacloprid 20% o Tiometoxan 25%, repitiendo los tratamientos cada 45 días.

Asimismo, es necesario adoptar otro tipo de medidas preventivas, como pueden ser: no podar ramas verdes, ya que las heridas en ramas jóvenes atraen especialmente a los adultos de esta especie invasora.

Quienes posean palmeras canarienses y dactiliferas deberán insistir en los tratamientos preventivos, que son obligatorios en la zona donde se detecten ejemplares de picudo rojo. Es muy aconsejable también hacer uso de la guía para la identificación del picudo rojo en las palmeras y la guía del tratamiento, ambas se pueden encontrar en la web de Sanidad Vegetal de la Junta de Extremadura.