El tren vuelve a sufrir otra avería y Renfe traslada a los pasajeros en taxi

Aunque resulta difícil de creer, Renfe es una empresa ferroviaria. Exclusivamente ferroviaria, sin división de transporte por carretera.

Y así es en casi toda España. Sin embargo, en Extremadura, Renfe compatibiliza el transporte sobre raíles con el traslado de pasajeros por carretera.

La población extremeña usuaria del ferrocarril ya está acostumbrada y no le extraña lo más mínimo.

Este martes y 13 de noviembre ha vuelto a ocurrir. El tren ha sufrido una avería mecánica y como Renfe tiene una OSP, es decir, una obligación de servicio público, se ha visto obligada a trasladar a sus pasajeros por otros medios.

Ha sucedido en Cáceres. El tren que debía salir a las 6:46 horas de la mañana, con destino a Sevilla pasando por Mérida, ha sufrido una avería y se ha quedado en la estación cacereña. Cumpliendo su obligación de servicio público, Renfe ha trasladado a los viajeros, quince, en taxi hasta Mérida, donde llegado aproximadamente a las 7:50 horas, unos cinco minutos después de la hora de llegada prevista para el tren averiado.

Y en Mérida, los pasajeros procedentes de Cáceres con dirección a Sevilla han subido a otro tren con la esperanza de llegar a su destino en la capital hispalense.

Un episodio más y no el peor en la historia, de misterio, cuando no de terror, del ferrocarril asignado a las tierras extremeñas.

El segundo tren que salió de Cáceres con dirección a Mérida lo hizo con 20 minutos de retraso, aunque por el camino recuperó parte del tiempo perdido y llegó a la capital autonómica con sólo 9 minutos de retraso.