Feijóo admite que no tiene los apoyos suficientes, pero pide al Rey ser candidato a la investidura

Alberto Núñez Feijóo ha comparecido tras finalizar la audiencia con el Rey, Felipe VI, a quien le ha trasladado su disposición para ser candidato a la investidura y convertirse en presidente del Gobierno de España con lealtad a la nación y a la monarquía constitucional.

Aceptaría el encargo con varios avales que “respaldan esta propuesta”, ha dicho, siendo uno de ellos el resultado de las elecciones. El Partido Popular consiguió 137 escaños (136 más 1 del voto CERA) y ganó al Partido Socialista por 16 diputados de diferencia.

El candidato del PP ha conseguido ya los apoyos de varias formaciones, entre ellas VOX (33 escaños), con quien gobierna conjuntamente en comunidades y ayuntamientos del país y con quien promete “proteger nuestra nación y la Constitución”.

De igual manera se ha anunciado ya el respaldo de Unión del Pueblo Navarro, con quien mantienen una relación histórica en Navarra con alianzas antiguas, y de Coalición Canaria, también socios de gobierno en las islas. Estas fuerzas tienen cada una un diputado.

Sumando los cuatro partidos alcanzarían los 172 diputados, a cuatro de la mayoría absoluta. Aun así, Feijóo la ve mejor opción que la de Pedro Sánchez, pues gobernaría en solitario y sin más condiciones que “España recobre la independencia de sus instituciones, la igualdad de todos sus ciudadanos y la censura de las imposiciones de las minorías”.

El líder popular entiende que presentarse a la investidura es cumplir con su deber ya que tiene que ponerse a disposición del Estado a pesar de las dificultades. En este sentido lamenta que haya partidos que no hayan acudido a la audiencia con el rey: “Demuestran lo poco que les interesa la gobernabilidad de España”.

La intención de Feijóo, si se produce el encargo por parte del Rey, es mantener contactos con los grupos parlamentarios a partir del próximo lunes o cuando finalice la ampliación del plazo concedido por la Mesa del Congreso para su constitución.

“Me consta que desde el PSOE pretenden hacer ver que los que han ganado las elecciones no tienen que gobernar y que los que las han perdido sí”, ha expresado.

De producirse el encargo, promete “un gobierno estable y que no esté supeditado a ninguna ambición personal”.