Habilitan un teléfono de atención psicológica al mayor en Badajoz

El alcalde de Badajoz, Francisco Javier Fragoso, ha dado a conocer las últimas medidas que se han tomado, entre ellas la de habilitar un número de teléfono de atención psicológica a los ancianos.

Se trata de un número de teléfono específico dedicado a las personas mayores, sobre todo aquellas que están solas en casa, y que pone en marcha con cuatro profesionales al mando que estarán disponibles de lunes a viernes en horario de 10 a 14 horas y de 17 a 21 horas.

El número de teléfono habilitado es el 900150025. Esta iniciativa se une al ya habilitado por el Instituto Municipal de Seguridad Social para la asistencia a aquellas personas o familias que lo precisen (el 924210099).

También desde el IMSS se llevarán a cabo vídeos destinados a mayores para ejercitar la memoria, hacer actividades, filmes de cultura o recetas tradicionales de cocina. También se amplían los talleres de acondicionamiento físico y bailes regionales.

Estrategia que también pone en marcha la concejalía de Juventud que sube vídeos con recursos formativos y otros contenidos de interés para este colectivo.

Asimismo, el Ayuntamiento de Badajoz ha habilitado un apartado en la página web para la red de voluntariado ante el coronavirus, donde empresas y ciudadanos pueden ofrecerse para ayudar a los grupos más vulnerables.

OTRAS MEDIDAS

A partir de ahora los bomberos tendrán turnos fijos sin intercambios. Los turnos se dividirán en dos zonas diferencias para que, si hubiera un contagio, solo entrara en cuarentena la mitad de la plantilla disponible en ese momento.

Situación similar la de la Policía, que se dividirán las unidades operativas en las inspecciones de Valdepasillos y la subinspección de Montesinos.

En la primera están presentes los agentes de comunicación, 092 y policías en segunda actividad, en la segunda estará la unidad de Giapol, Silice y unidades de proximidad. No se harán rotaciones y tan solo podrán estar trabajando cuatro efectivos los que pueden estar juntos.

El servicio de Grúa se traslada a la frontera de Caya. Así, los agentes se dividirán en tres ubicaciones intentando minimizar los daños en caso de contagio.