Juicio Manuela Chavero: revelan las duras conversaciones del acusado con prostitutas
15 de Mayo de 2024
Acusado con la Guardia Civil / Archivo 7Días
Este miércoles 15 de mayo continúa el juicio por la muerte de Manuela Chavero en la Audiciencia Provincial de Badajoz. En esta jornada están declarando agentes de la Unidad Central Operativa (UCO).
Debido al análisis realizado por miembros de la UCO tras el volcado del contenido del teléfono de Eugenio Delgado, estos sostienen que el acusado utilizaba un tono agresivo con las mujeres. Así lo han resaltado tras el análisis de conversaciones interceptadas en el terminal.
Conversaciones con mujeres que ejercen la prostitución
En el terminal se incautan conversaciones con mujeres que ejercen la prostitución, a las que tenía guardadas en su agenda con adjetivos. Todos esos nombres tienen una “A” delante con un adjetivo identificativo para cada una de ellas. Ejemplo de ello es una de las mujeres catalogada en su teléfono como “A Embarazada”.
Los agentes resaltan que en las conversaciones que se adjuntan en el informe, el acusado “pide información de costes, tarifas, y posteriormente pregunta qué servicios ofrece y hasta dónde puede llegar con cierta agresividad o ciertas prácticas más violentas”.
Asimismo, los agentes de la UCO señalan que, en esos diálogos, “si la persona continúa diciéndole que sí, como por ejemplo del matrimonio de Sevilla que por problemas económicos precisaban realizar esta práctica sexual, continúa preguntando para saber hasta dónde puede llegar. De hecho, Eugenio llega a preguntarle al marido de la mujer que iba a ejercer la prostitución si puede utilizar otros medios además de su miembro viril tales como la mano o la introducción de otro objeto”. Preguntas que realiza para saber si podría “producir ese daño, incluso haciéndola sangrar. El producir ese punto de dolor, incomodidad, hacerle pasar el mal rato es lo que le llama la atención de ese servicio”.
Uno de los agentes ha asegurado que Eugenio, en sus conversaciones analizadas, “siempre buscaba una posición de dominación”. Así, prosiguen, “por las conversaciones que hemos visto, él siempre está buscando una dominación sobre esa mujer. De hecho, cuando es al revés, corta la conversación. Siempre intenta estar por encima, haciendo valer su aspecto físico de corpulencia sobre ellas. Siempre va intentando subir ese tono. Él quiere asegurarse de hacer sangre a la mujer”.
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