Los empresarios apoyan la reacción civil contra el ‘tren de la vergüenza’

Bajo el título ‘No más un tren de la vergüenza y sí un tren digno para Extremadura’, las asociaciones empresariales extremeñas Círculo Empresarial Cacereño, Círculo Empresarial Placentino, Círculo de Empresarios de Badajoz y Coordinadora de Empresarios de Mérida han emitido un escrito en el que muestran su apoyo a la reacción de la “sociedad civil” contra el llamado ‘tren de la vergüenza’, y critican el “buenismo” de los cargos públicos tanto regionales como nacionales con respecto a esta lamentable situación.

ALARMA Y PROTESTA

“Debido a las últimas averías del denominado ‘tren de la vergüenza’, que vaticinamos no serán las últimas dado como está la situación actual, las asociaciones empresariales abajo firmantes debemos manifestar nuestro total apoyo a la reacción de alarma y protesta de la sociedad civil ante un panorama tan incierto como increíble, dadas las reacciones habidas desde la Administración central y autonómica anteriores y actuales, de un “buenismo” exacerbado y nada congruente con lo que es la realidad que sufren los ciudadanos extremeños respecto a la nefasta gestión del secular problema ferroviario en Extremadura”, afirman las mencionadas organizaciones empresariales.

“La solución que exigimos desde el ámbito empresarial no solo debe de ser de mejora de las infraestructuras para el transporte privado de las personas y mercancías, sino para el propio dinamismo de la región, ya que si no, el desarrollo económico y empresarial de Extremadura seguirá siendo una quimera, plena de soluciones erróneas y dificultades muy complicadas de resolver”.

EXTREMADURA, INCOMUNICADA

“Desde los años 80 del pasado siglo, se ha cercenado a Extremadura la posibilidad de mantener una comunicación fluida a través del tren con el norte del país, con los importantes puertos y núcleos industriales del norte de España, si no era a través de Madrid, lo cual propició que Extremadura estuviera 20 años incomunicada con Castilla y León, Asturias, Galicia, Cantabria, País Vasco... si no era a través de Madrid.

“Estamos en el siglo XXI y es preciso, imprescindible y urgente que Extremadura cuente con unas comunicaciones modernas que permitan a nuestras empresas y a nuestros productos competir en igualdad de condiciones con el resto del país y del mundo. Y en el caso que nos ocupa, unas líneas ferroviarias modernas, rápidas y útiles son necesarias desde cualquier ámbito que se observe. El progreso económico, con la falta de inversiones y la de oportunidades para el desarrollo empresarial, con las consiguientes y continuas trabas que se ponen desde la Administración central, el dinamismo cultural o la rentabilidad turística se ven muy afectados por la pésima gestión que se viene llevando a cabo desde hace más de treinta años, como es el caso sangrante en materia ferroviaria, ejemplo de candente actualidad nacional que afecta a nuestra tierra y sus gentes. Y eso, el colectivo empresarial que representamos, no lo puede seguir aceptado ni permitiendo”.

Como consecuencia de esta “pésima gestión”, las organizaciones firmantes del escrito citan “dos ejemplos claros: El PIB en Extremadura en el año 2017 marcaba 17.262 euros, respecto a los 24.999 euros en España. Y el índice de riesgo de pobreza es del 44.3% respecto al 26,6%. Así nos va”.

JUSTAS REIVINDICACIONES

“Por todo ello, y como muestra de la gestión de la sociedad civil con sus justas reivindicaciones, mostramos nuestro apoyo a colectivos que desde hace unos pocos años han conseguido poner el problema del ferrocarril extremeño sobre la mesa de debate nacional. Una reivindicación que en el caso de la plataforma viudadana Milana Bonita ha conseguido realizar de manera pacífica, ganándose el apoyo de Extremadura y gran parte de la ciudadanía nacional”.

“Los extremeños, y en nuestro caso, los empresarios representados por las asociaciones firmantes de este documento, no queremos ser más que nadie, pero tampoco queremos ser menos que nadie, en ninguno de los aspectos sociales, económicos o de oportunidades para el futuro, respecto al de otras comunidades autonómicas de España. Si la financiación autonómica, los dineros del Estado y los apoyos desde Europa deben de aflorar y sumarse, que sea de una vez pero quietos y callados no. Por ello, nuestro apoyo más firme y sin ambages a las movilizaciones, acciones y reclamaciones que desde la sociedad civil se están realizando no sin anunciar que a partir de ahora una comisión que será elegida al efecto, además de llevar a cabo cuantas acciones de reivindicación haya que adoptar, hará las gestiones pertinentes a todos los niveles, políticos, sociales y económicos, para coadyuvar a que de una vez por todas, dados los precedentes y la situación actual, pasemos de tener un tren de la vergüenza a un tren digno para Extremadura”.