Organizan una manifestación por la difícil situación que está viviendo un padre en Badajoz

Los padres de Izan, de 9 años, se divorciaron hace casi cuatro años. Ahora vive con su madre y su padre siente que lo ha perdido. Miguel, progenitor del menor, quiere que esto cambie porque ve injusto lo que él y su hijo están sufriendo.

La Asociación por los Derechos de los Niños, Custodia Compartida Extremadura, con la colaboración de LATAM & Europe la Infancia Primero, están apoyando el caso con el eslogan ‘Todos somos Miguel e Izan’ y han organizado una manifestación este domingo, 23 de abril, en la avenida de Huelva (frente al Corte Inglés) en Badajoz a las 12:00 horas.

La historia comienza cuando Miguel comunica a su ahora ex mujer que quería el divorcio y solicitar la custodia compartida del hijo de ambos. Según cuenta la asociación, en este momento ella lo denunció por violencia de género y hasta ahora se ha visto involucrado en más de 30 procesos legales. Sin embargo, ninguno ha prosperado hasta la fecha y “actualmente existen cinco contenciosos legales abiertos contra la progenitora por denuncias falsas”.

A su juicio, el objetivo de la madre -que también tiene una hija- es alejar al menor de su padre, además de aprovecharse de todas las ayudas y beneficios que conllevan la custodia exclusiva. Hay que añadir que ella sigue residiendo con Izan en la vivienda monoparental, la cual es propiedad en exclusiva de Miguel.

“El niño está siendo objeto de malos tratos, muchos informes indican que tendrían que estar con el padre”, afirman desde la asociación a 7Días a la par que aseguran que Miguel no tiene nada en su contra a pesar de las denuncias interpuestas por la madre del niño. Por el momento la Justicia sigue investigando el caso.

De hecho, sostienen que la progenitora lo lleva continuamente a urgencias para poder denunciarlo por malos tratos. Ninguna de ellas ha prosperado y aseveran que el niño les ha dicho que su madre le obliga a mentir cuando lo lleva al médico.

“Mientras tanto, Izan sigue a cargo de ella a pesar de existir informes psicosociales a favor del progenitor y que incluso especifican bajo el enorme riesgo que se encuentra el menor y las posibles consecuencias en un futuro”, expresan.

Durante todos estos años el entorno de Miguel también ha recibido “denuncias, amenazas, insultos y coacciones”, declaran a este medio sus allegados, causándoles impotencia al no poder hacer nada más que esperar a la decisión de la Justicia.

Por estos motivos piden a la ciudadanía que Miguel sea apoyado el domingo, animando a los vecinos de Badajoz y alrededores a acudir con camiseta blanca. Para ellos es fundamental con el fin de que “el niño disfrute de un ambiente de paz y concordia familiar”. Según sus familiares, Izan les ha transmitido que él quiere vivir con su padre pero su madre le dice que, si eso pasa, ella tendría que acabar viviendo en la calle.