Militares de Bótoa se desplazan a Toledo para apoyar a su compañero y su familia

La tarde del pasado sábado un tren arrolló un vehículo en el que viajaban tres personas. Una niña de 18 meses, que falleció en el acto, una mujer de 32 años y un hombre de 36 años, militar en la Base de Bótoa de Badajoz.

El hecho se produjo en la localidad toledana de Calera y Chozas, en la vía de la línea que une Madrid con Badajoz, en el momento en el que el vehículo iba a cruzar el paso a nivel.

Ante tales hechos, no han tardado en llegar los gestos de apoyo y los militares, como suele ser costumbre en el Ejército, se han movilizado.

Según han explicado a 7Días fuentes de la base, normalmente cuando le ocurre un accidente de gravedad a un miembro de la Brigada Extremadura XI mientras trabaja se activa un procedimiento de apoyo a la familia para cualquier cosa que necesite.

En este caso, aunque ha sido un suceso fuera de su trabajo, sus compañeros no han dudado en hacer lo propio y desplazarse hasta Toledo, donde se encuentra ingresado grave el cabo perteneciente al Regimiento Saboya 6.

“La familia nos tiene a su lado”, han expresado a este medio desde el Cuartel de Menacho, un acto ejemplar que demuestra el compromiso y la humanidad en momentos tan duros como este.