Testimonio ampliado del militar que encontró el móvil de Pablo Sierra

Como ya afirmara en su última declaración a los medios: a las 20:25 horas del viernes (3 de diciembre) encontró el móvil, vio una luz, escuchó el móvil y al principio desconfió.

"Vi la luz y me quedé parado por si había alguien que me quería robar, pero a partir de la segunda llamada me acerqué y vi que tenía más de 20 llamadas perdidas y que estaba manchado".

"Lo cogí y dije, me he encontrado este teléfono me imagino que lo han perdido"… "Estaban muy asustados y me decían todo el rato Pablo, Pablo, ¿dónde está Pablo?, y ya me contaron que estaba desaparecido".

"Les di mi número particular y les mandé mi ubicación y comenzaron a venir los familiares. Yo llamé al 112 y me derivaron a Guardia Civil y Policía Nacional, mientras al móvil siguieron llamando, hablé con otro familiar y también llamó la directora de la residencia".

"Puse la linterna del móvil de Pablo, porque yo no tenía casi batería y me puse a buscar al chico, y en ese momento miré el móvil y pensé 'esto va a ser sangre', y me manché la mano porque la sangre no estaba seca".

"Me puse a buscarlo por si estaba herido y estuve como dos horas haciendo batidas con la Policía, Bomberos, y me dieron las gracias".

"Yo no eché agua oxigenada al móvil, me eché agua oxigenada en la mano, en la mancha de sangre que tenía con la Policía y Cruz Roja, pero no en el móvil, reaccionó y era sangre. Confirmado. No alteré el móvil, no dejé a nadie que lo hiciese, en el momento que vino un policía y me dijo ‘dame el móvil’ se lo di, a nadie más le dejé tocarlo”.

“En el momento que lo coge y me informan digo ‘ostras, igual tengo en la mano la prueba de un delito’. Hay un camino de tierra transitable para vehículos a unos ocho metros donde encontró el móvil. “Que estaba intacto, daba la sensación de que lo hubieran tirado desde ese camino hasta la zona donde lo cogí”.

“Ahí no va quien no tiene intención de ir, estuvimos buscando cuando batimos la zona y yo les dije que buscasen ramas abatidas”.