Todo abierto para Riazor

El Club Polideportivo Polideportivo Cacereño cosechó un empate a cero en el Principe Felipe, en la ida de los play off de ascenso directo contra el Deportivo de la Coruña B, por lo que deja todo abierto para Riazor el próximo fin de semana.

Los cacereños salieron muy bien plantados en el terreno de juego y tuvo la primera ocasión en un balón que acabó atajando el portero coruñes. Los saques de banda de los locales, colgados al corazón del área, fueron un arma de los hombres de Adolfo Muñoz.

La primera ocasión coruñesa fue a balón parado. Óscar Pinchi remató a la salida de un saque de esquina pero el balón salió muy por encima del marco defendido por Camacho.

El filial coruñés intentaba jugar el balón con un juego de toque y tener la posesión pero poco acostumbrados al terreno de juego del Príncipe Felipe no pudieron tener la manija del partido.

Además fue un partido repleto de faltas y el colegiado se tuvo que emplear a fondo para detener esa situación. A pesar de lo trabado tan solo enseño una tarjeta amarilla al equipo visitante en todo el encuentro.

Todavía quedaba tiempo antes del descanso para que ambos conjuntos tuvieran una oportunidad para decantar la balanza a su favor. El coruñés Nacho remató directamente fuera una falta lateral.

La última ocasión del Cacereño en la primera parte fue la más clara pero el colegiado anuló la jugada por falta sobre Alex Cobo, que se mostró muy seguro debajo de los palos durante todo el encuentro.

SEGUNDA MITAD

Tras la reanudación los de Adolfo Muñoz tuvieron la más clara del partido pero la fortuna no estuvo a favor del cuadro extremeño y el balón se topó con el palo. Perdonaba el Cacereño.

Fue entonces cuando los coruñeses obligaron a Camacho a realizar la mejor intervención del partido con una tremenda parada que salvaba a su equipo de un tanto que podía haber sido una losa.

Adolfo Muñoz, viendo que se le estaba yendo el partido al Cacereño, dio entrada al terreno de juego a Martins. Poco minutos después sería protagonista con un gran disparo que se marchó alto por muy poco.

En los últimos minutos el Deportivo B se fue al ataque, primero con una falta de Manu Molina que se fue por muy poco y luego con un remate de Borja a un centro lateral de Lucas Viña, que no lograron modificar el marcador.

De esta manera, con el empate la eliminatoria queda abierta y Riazor será el marco incomparable donde el Cacereño intentará doblegar al filial coruñés para ascender a Segunda División B.