Un pueblo extremeño elabora 2.000 mascarillas en cinco días

Ante la crisis sanitaria que atraviesa todo el país, son muchos los actos de solidaridad que surgen para facilitar las medidas de protección necesarias a todos aquellos que luchan por los ciudadanos.

Para ello, en Esparragosa de la Serena (Badajoz) los vecinos de la localidad recaudaron en dos días la cuantía total de 2.300 euros, dinero con el que compraron los materiales necesarios para la confección de 2.000 mascarillas.

La elaboración de estas mascarillas se ha llevado a cabo -siguiendo los criterios sanitarios- con la colaboración de 50 voluntarios entre costureras, montaje, embalaje y reparto del material.

La iniciativa tomo forma gracias a la propuesta de un joven enfermero de Esparragosa de la Serena y a un grupo de vecinos que, ante la escasez de material de protección para el personal sanitario de la localidad, decidieron ponerse manos a la obra y elaborar equipos de protección.

Tras la confección de esos dos millares de mascarillas ahora el municipio se propone elaborar 7.000 unidades más. También con el resto de dinero recaudado se procederá a la compra de productos de desinfección que donarán a la administración local para limpiar las calles.

Del total de los 2.300 euros, parte han sido donados por la Asociación Cultural Asbaraguzza, Asociación de Padres y Madres del Colegio Rural Agrupado de Esparragosa, Asociación Medalla Virgen de Milagrosa, Asociación de Cazadores Virgen de los Dolores, agrupaciones políticas y PIDES.

OTRAS ACCIONES

En Esparragosa también han realizado otro tipo de acciones voluntarias como la desinfección de calles por agricultores voluntarios que ponen a disposición del municipio su maquinaria agrícola, como tractores y atomizadores, así como personas voluntarias que desinfectan con pulverizadores manuales.

Además, para llevar mejor los días de confinamiento, se ha creado la iniciativa ‘Esparragosa desde Casa’, que pretende a través de redes sociales compartir actividades infantiles, culinarias, ayuda a escolares, lecturas de relatos, cursos de fotografías, campaña de contacto telefónico con nuestros mayores o la potenciación del famoso ‘Carnaval Zorrero’.