Cáceres, la ciudad Patrimonio de la Humanidad que duerme por el coronavirus

Vacías. Así llevan más de tres días las calles de Cáceres. La ciudad Patrimonio de la Humanidad sufre duramente la crisis del coronavirus. Sin embargo, a su alcalde no le ha temblado la mano al imponer medidas restrictivas desde el primer momento para combatir su propagación.

Luis Salaya ha sido uno de los primeros alcaldes extremeños en anunciar medidas para paliar los efectos del COVID-19. Y es que, el área de salud de Cáceres es una de las más afectadas de la región.

De los 95 casos detectados a fecha de 15 de marzo, 55 pertenecen a esta área, si bien es cierto que un gran número de ellos se encuentran en la localidad vecina de Arroyo de la Luz. Y como buenas hermanas, Cáceres sufre por la pérdida de tres vecinos de este pequeño municipio de apenas 5.000 habitantes.

Desde el pasado miércoles, el alcalde eliminó el fichaje manual de los trabajadores de este ayuntamiento y creó un grupo de trabajo para evaluar medidas preventivas en el caso de que el riesgo aumentara. Y así ha sido. Conforme pasaban las horas la situación empeoraba y las medidas iban siendo cada vez más duras. Cierre de parques y espacios públicos, teletrabajo para los profesionales del consistorio, limitación de los asistentes a funerales y bodas civiles,…

Precisamente ayer, Salaya reunió a la Junta de Gobierno de manera extraordinaria y urgente para analizar las medidas que establece el Estado de Alarma. Así, Cáceres reduce el aforo de los autobuses al 40%. Además, se vigilará que se respete la distancia de seguridad y se recomienda que solo se utilice para ir al trabajo, al médico, a la farmacia o a comprar productos de primera necesidad.

El consistorio cacereño ha suspendido también el pleno del próximo jueves así como las Comisiones y los Consejos Rectores. “Esto no significa que suspendamos nuestro trabajo”, señala el alcalde. El Ayuntamiento va a seguir funcionando, cerrado al público, pero intentando mantener la máxima normalidad posible.

Los concejales siguen trabajando desde sus despachos o desde sus casas, pero siguen trabajando en contacto con sus Jefes de Servicio, con los funcionarios y, a través de las redes sociales y del teléfono, también con la ciudadanía.

La concejal de Economía y Asuntos Sociales ha comenzado ya a trabajar en ayudas económicas a empresas y autónomos de la ciudad. También en ayudas sociales de primera necesidad y en suministros energéticos. “Todo esto va a ser muy importante porque cuando esta situación extraordinaria termine somos conscientes de que muchos de nuestros vecinos y de nuestras vecinas van a estar en una situación económica muy complicada”, señalan desde el consistorio.

ABUSO

Salaya tampoco se ha cortado en denunciar que algunos cacereños “abusan” de las medidas que se permiten en el Estado de Alarma. Recuerda que para aquellos ciudadanos que tengan mascotas, se les permite sacarlas cerca de sus viviendas y por el mínimo tiempo imprescindible.

“Tampoco podemos coger una bolsa de la compra e irnos a hacer la compra a la otra punta de la ciudad”, insiste. De esta manera el alcalde dice que “vamos a asegurarnos de que todo el mundo cumple las medidas, aunque esto suponga en algunos casos tener que tomar medidas desagradables”.

De igual manera ha querido agradecer al resto de habitantes el respeto por las normas establecidas ante esta dura situación.