Cae la noche y no hay novedades sobre el paradero de Pablo

Finaliza el segundo día de búsqueda del estudiante de Medicina en Badajoz y natural de Zorita (Cáceres), Pablo Sierra Moreno, quien reside en la Residencia Universitaria de Fundación Caja Badajoz (RUCAB).

Fue durante la noche del jueves al viernes cuando sus amigos perdieron contacto con él tras pasar la noche juntos en un piso, transcurso de varias horas de las que ha trascendido que Pablo fue visto esa noche (en hora no determinada) en un pub ubicado en la calle Arco Agüero, así como en la calle Zurbarán, ambas cercanas y localizadas en el Casco Antiguo de Badajoz.

Se desconoce el orden de los factores, pues de la investigación no ha trascendido prácticamente nada por encontrarse judicializada, pero previsiblemente fue visto a posteriori de pasar la noche en casa de amigos.

Esa noche en el Casco Antiguo pacense (jueves universitarios) era más tranquila de lo normal, sin excesivo movimiento por encontrarse inmersos en época de exámenes y porque aún no se estaban celebrando las habituales cenas navideñas de empresa con las que la zona antigua se abarrota.

Apenas había abiertos algunos pubs como Antigualla, Botanic, Bambora o Atenea, con calles semivacías todo parecía apaciguado y bajo control. Pero en ese contexto desapareció Pablo, y aunque con escasos transeúntes, quizás alguien pudo ver algo.

De la investigación ha trascendido que apareció su teléfono móvil en la zona conocida como El Pico, y no en el entorno de Puerta de Palmas como algunas personas han indicado erróneamente en las redes sociales.

Y este hecho lo cambia todo, porque la Policía tendrá acceso a conocer cuáles fueron los últimos mensajes intercambiados por Pablo y con quién, así como a quién pudo realizar o de quién pudo recibir la última llamada.

El hecho de haberse encontrado el móvil en la zona de El Pico es inquietante, pues no es un lugar transitado en invierno, recordemos que durante la madrugada del jueves al viernes en la capital pacense no se superaban los 3 grados, por lo que es difícil entender que alguien se encontrase allí bajo circunstancias normales.

Otro interrogante que se abre es si realmente Pablo pudiera haber estado allí, o segundas o terceras personas arrojaron su móvil en esta zona del río Guadiana. Además, otro posible bulo que circula por las redes es que el móvil se ha encontrado manchado de sangre, algo sobre lo que los cuerpos de seguridad del Estado que se encargan del caso no han informado.

Por último, circula también que Pablo llegó a coger un taxi la noche de su desaparición, información esta que tampoco ha sido confirmada por la Policía.

Es imposible que las redes no elucubren sobre el caso, pero es importante dejar trabajar al amplio dispositivo (unas 50 personas) que se encarga desde hace dos días de acercarse al paradero de Pablo a la mayor brevedad intentando que la población no interfiera de forma negativa en las informaciones, aunque solicitando que si alguien puede aportar datos verídicos sobre el caso entre en contacto con ellos.

El dispositivo ha informado hace escasos minutos (19:00 horas) que ante la falta de luz mañana proseguirán con la búsqueda bajo el objetivo de poder encontrar a Pablo a la mayor brevedad.

Por su parte, varios son los vecinos de Zorita (CC) los que se están trasladando a Badajoz para arropar a la familia y, de esta manera, colaborar también en las labores de búsqueda.

Además, por las redes sociales se están movilizando para, por si fuera necesario, hacer batidas ciudadanas durante el puente.