Campamento Dignidad levanta la acampada frente a la casa de Vara

Campamento Dignidad ha levantado la acampada que estaba enfrente de la Casa del presidente de la Junta de Extremadura, en Mérida, desde el pasado día 13 de julio.

Indican que las familias allí instaladas “habían recurrido con enorme valentía y sacrificio, algunas de ellas son madres y padres de menores, a este procedimiento de lucha para hacer públicas y reivindicar soluciones a sus problemas de viviendas”

En los últimos días se habían mantenido diferentes reuniones con representantes de la Secretaría General de la Vivienda recibiendo propuestas de soluciones a sus peticiones, tanto en el acceso a viviendas como en ayudas de alquiler, “confiando en que las mismas se hagan realidad lo más pronto posible”, indican.

“Los múltiples inconvenientes para disfrutar de una vivienda que afectan a estas personas, la carencia de soluciones habitacionales, las amenazas de desahucio, la falta de un techo donde vivir, con los mismos agobios e incertidumbre, son idénticos a los que sufren miles de familias extremeñas”.

Además, desde Campamento Dignidad denuncian un componente negativo más que añadir a todas estas “carencias habitacionales”. “Hay que sumar la presión institucional que sufren aquellas personas que se atreven a recuperar viviendas abandonadas, como ocurre con las que han rescatado del abandono algunos de los pisos de la guardia civil en el barrio de Suerte de Saavedra en Badajoz, se les presiona y se les embiste por las instituciones políticas locales y regionales. No hay límites físicos para obligarlas a desistir de sus luchas, y si es preciso se hace lo que se está haciendo, haya por medio personas mayores o menores de edad, aunque afecte a su salud, para obligarlas a que abandonen, impidiéndoles el acceso al agua”, denuncian.

De este modo, señalan que “la Junta debería ser consciente de que el problema de la vivienda en la región se irá agravando con el paso del tiempo”. “Las necesidades aumentan y no hay proyecto político capaz de resolver lo que debe ser un derecho fundamental, tal y como establece teóricamente el artículo 47 de la Constitución Española”.

Así, desde Campamento Dignidad siguen insistiendo y movilizando para luchar por una serie de reivindicaciones “básicas para una vida digna”.

Entre ellas piden que se cumpla lo prometido a las personas que acamparon en lo referente a las viviendas y ayudas de alquiler. También indican la urgente necesidad de agua para las familias que recuperaron los pisos de la Guardia Civil de Suerte de Saavedra (Badajoz). En este sentido consideran que la Delegación del Gobierno y la Junta de deben intervenir para que las familias que viven en las viviendas recuperadas de la Guardia Civil puedan disponer del agua, “cosa que parece un sueño inalcanzable en pleno siglo XXI”. “No se entiende que las autoridades políticas locales, provinciales y regionales impidan que personas, mayores y menores, puedan disponer de algo tan básico para la vida como es el agua”, critican.

Que finalicen los desahucios y las amenazas mediante cartas. Campamento Dignidad pide también la ampliación del parque de viviendas de la Junta. Sobre este asunto manifiestan que la lista de solicitantes de viviendas de promoción pública “supera con mucho las posibilidades del parque de viviendas de la Junta”.

“La lista crece año tras año y el número de viviendas en manos de la Junta es muy pequeño, siguiéndose una política nefasta y cruel para disponer de viviendas vacías que consiste en echar a un pobre para meter a otro pobre. La Junta de Extremadura tiene que tomar todas las medidas posibles a su alcance, que son muchas, para que las viviendas en manos de las entidades bancarias puedan ser destinadas al alquiler social. Hay que recordar que la inmensa mayoría de las entidades bancarias fueron rescatadas con dinero público, lo que les permitió el acceso a esas viviendas”.

Por último, piden a la Administración regional que adquiera las viviendas que están vacías, como es el caso de las viviendas de la Guardia Civil.