Cerca de 40.000 conductores extremeños en riesgo de perder su permiso de conducir

Un total de 37.769 conductores en Extremadura se encuentran actualmente en riesgo de perder su permiso de conducir.

No cometer más infracciones en los próximos dos años, o realizar un curso en una autoescuela autorizada por la DGT, es la única solución que tienen. En la actualidad, hacer un curso de recuperación parcial, nos permite recuperar hasta 6 puntos del permiso de conducir.

Sobre una cifra de 658.800 conductores censados en Extremadura, según el portal estadístico de la DGT, 37.769 conductores extremeños tienen menos de 11 puntos en su permiso de conducir o cuentan con un saldo 0.

La provincia que cuenta con un mayor porcentaje de conductores con un saldo inferior a 11 puntos, es Badajoz, con un total de 24.825, y Cáceres es la provincia que cierra la clasificación de conductores con menos de 11 puntos, con 12.940 conductores en esa situación.

Para el director de la empresa Inmovial, Alfredo Campa, “los datos son similares en los últimos años, siendo la prioridad de las conductoras y conductores realizar un curso que les permita recuperar con rapidez los puntos y evitar quedarse sin permiso”. “El profesorado, durante los cursos, aborda con gran profundidad las causas principales de accidentes, con especial atención a las drogas, el alcohol y el uso inadecuado de los fármacos, tratan los factores de riesgo como la velocidad y las distracciones (entre ellas el uso del teléfono móvil mientras se conduce)”, continua.

Julia Barrera, es titular y profesora de la autoescuela Julia en Almendralejo, Badajoz, “Tratamos de sensibilizar como primera opción. El alumnado ya sabe conducir, es únicamente cuestión de que conozcan los riesgos, que respeten y tengan en cuenta que el tráfico, como conductores o peatones, es un espacio donde todos convivimos, jóvenes, niños, mayores. Hacer que nuestra movilidad sea más amigable y saludable, es nuestro objetivo como formadores.”

Anteriormente, estos centros, 360 en toda España, a excepción de País Vasco y Cataluña, estaban regulados por un sistema de concesión. Ahora, desde el 25 de septiembre han pasado a estar regulados por un sistema de autorización administrativa, lo que ha ampliado el número de centros impartidores autorizados, permitiendo a los conductores acceder más fácilmente a estos cursos, en un centro cercano a su domicilio.