Este viernes ocurrirá un fenómeno que no se repetirá hasta dentro de 467 años

Siete planetas del sistema solar se alinearán el próximo 28 de febrero, un evento que no se repetirá hasta el año 2492, dentro de 467 años.

La exactitud y precisión con la que estos siete astros se situarán en este momento es realmente excepcional. Este fenómeno será todo un espectáculo astronómico sin precedentes en el que se podrá contemplar simultáneamente a Mercurio, Venus, Marte, Júpiter, Saturno, Urano y Neptuno.

Este acontecimiento, que empezó a adquirir forma en enero con la perceptibilidad de seis planetas, llegará a su punto culminante con Mercurio.

EN QUÉ CONSISTE UNA ALINEACIÓN DE PLANETAS

Una alineación planetaria sucede cuando diversos planetas se ubican al lado del Sol y desde la Tierra son visibles en una misma zona del cielo. Ocurre motivada por las distintas velocidades orbitales de los planetas, que de vez en cuando se cruzan de tal forma que sus trayectorias se alinean.

Estos ‘desfiles planetarios’ no son raros, de hecho, son habituales cuando hay tres o cuatro planetas implicados. Sin embargo, la intervención de siete planetas en una formación tan exacta sí se trata de un suceso sumamente singular y magnífico.

DÓNDE Y CÓMO VER ESTE ESPECTÁCULO

Los expertos aconsejan ubicarse en un sitio con cielos oscuros, en áreas distantes de la contaminación lumínica. Las zonas montañosas y rurales son excelentes para disfrutar al máximo del evento.

Además, será crucial verificar el clima de ese día, ya que es imprescindible que el cielo se encuentre despejado para que el fenómeno sea perceptible y se pueda ver sin problemas. En caso de que se quiera ver detalles más específicos, aseguran que los telescopios y prismáticos son una buena opción.

EFECTO VISUAL

Aunque en parte rompa la magia, hay que resaltar que una alineación planetaria no es meramente un fenómeno astronómico, sino que se trata de un efecto visual. Es la eclíptica (línea ficticia) la que nos provoca la impresión de que se aproximan entre sí en el firmamento, aunque esto no es una realidad tangible. Es una ilusión óptica desde nuestra perspectiva terrestre.