Estudio de la Nasa: podría haber vida en otro planeta

Los ojos de la NASA están puestos en el exoplaneta K2-18b. El Telescopio Espacial James Webb (JWST), el más potente construido hasta la fecha, ha estado apuntando sus instrumentos hacia el sistema estelar que lo alberga. Los datos que ha podido captar reflejan el indicio más prometedor de vida en otro planeta.

Dónde se encuentra

K2-18b se encuentra a 124 años luz y es 2,37 veces nuestro planeta. Orbita a su estrella cada 32,9 días, muy similar a la Tierra. Fue descubierto en 2015, y en él se encontró vapor de agua y un posible océano en su superficie. Ahora, las observaciones del JWST pueden ir un paso más allá.

En su atmósfera, se han encontrado rastros de dimetilsulfuro, un compuesto que en la Tierra se produce fundamentalmente por actividad microbiológica. Sólo se conoce un proceso natural que sintetiza este gas, y su responsable es un tipo de fitoplancton. Estas características podrían ser indicios de un planeta capaz de albergar vida.

Sobre el descubrimiento

El descubrimiento ha resonado en toda la comunidad científica, desatando una oleada de expectativas sobre lo que el telescopio podría revelar en el futuro. El James Webb está programado para seguir realizando observaciones que validen o descarten la presencia de vida y otros posibles bioindicadores.

Este avance representa no solo un logro técnico significativo, sino también un monumental paso adelante en nuestra comprensión del cosmos. De momento, los científicos piden cautela, advirtiendo la necesidad de seguir estudiando K2-18b para poder confirmar que no estamos solos en el universo.