"Extremadura es una de las regiones de Europa con mayor índice de desertificación"

Cada 5 de junio se celebra en todo el planeta el Día Mundial del Medio Ambiente. Este año, Arabia Saudí es el país anfitrión, y la celebración se centrará en la restauración de tierras, la resiliencia a la sequía y la desertificación, con el lema ‘Nuestras tierras. Nuestro futuro’.

Según FONDENEX, “el lema y los objetos del mismo son grandes problemas que tiene Extremadura”. Así, desde la organización señalan que “en la década de los 60 y 70 y del siglo pasado, se arrasaron decenas de miles de hectáreas de bosque y matorral mediterráneos para sustituirlas por extensas plantaciones de eucaliptos y pinos, fundamentalmente. No sólo se destruyó una valiosísima vegetación natural, que albergaba a especies animales tan escasas como el Águila Imperial Ibérica, el Buitre Negro, la Cigüeña Negra o el Lince Ibérico, sino que se provocó un gran efecto erosivo en las laderas de las sierras, y una desertificación creciente de estos terrenos”.

Como consecuencia, “millones de encinas fueron arrancadas en nombre de un falso progreso, para la instalación de regadíos no rentables sobre suelos muy pobres o simplemente para carbón”, apuntan.

“Extremadura es una de las regiones de Europa con mayor índice de desertificación, un 10% de su superficie, con peligro de afectarse un 60%, ocasionado en gran parte por estas malas prácticas forestales, que felizmente se lograron paralizar en la década de los 80”, manifiestan desde la organización.

Aun así, señalan que “pero quedan miles de hectáreas de terreno desertificados, todavía en muchos casos con eucaliptos, que es preciso recuperar. Lo que se está haciendo es poco para lo mucho que queda por hacer”.

“También habría que hablar de la destrucción de las riberas de nuestros ríos, una verdadera muralla frente a la sequía, bien por canalizaciones realizadas sin sentido o por extracciones de áridos abusivas. El pasado fue terrorífico para estos bosques de galería que contribuían a mantener una reserva hídrica permanente, sostienen”.

RIESGO DE DESERTIFICACIÓN Y SEQUÍA

Desde la organización informan que “Extremadura, junto con Castilla la Mancha, Madrid, la Comunidad Valenciana y parte de Andalucía, ocupan el grupo de más riesgo de desertificación y sequía”.

“Es el momento de reflexionar sobre el uso del agua, un bien muy escaso, la idoneidad de ciertos cultivos, la política forestal adecuada, el sobrepastoreo, el uso de insecticidas y plaguicidas y la ocupación de terrenos agrícolas y ganaderos por millones de plantas fotovoltaicas y otras industrias, que contribuyen de forma importante a la pérdida de fertilidad del suelo”, afirman.

“El Día Mundial del Medio Ambiente, por desgracia, no es una celebración, sino un triste recordatorio que vamos subidos en un tren que va hacia un precipicio y que no podrá parar de golpe, por lo que es preciso ir disminuyendo su velocidad progresivamente.

Restaurar los terrenos forestales y los bosques de ribera arrasados "debe ser un gran objetivo a seguir para detener la desertificación y la sequía”, concluyen.