Es cierto, y estamos viendo ya la diferencia. Nunca voté al Sr. Vara, pues no es el pesoe bueno para nada ni nadie, pero en preparación, disposición, conocimientos y hasta en lo personal hay una diferencia grandísima con esa mujer obediente a los hombres que ha puesto el pépé a la orden de los guardias de la casa de los horrores...
Que ridículo tan espantoso, nunca me sentí extremeño, menos mal, ahora está justificada mi duda. Menos mal, que me queda Portugal!