García Bernal se enorgullece de la política de regadíos a pesar de las críticas

La consejera de Medio Ambiente y Rural, Políticas Agrarias y Territorio, Begoña García, compareció a petición propia en el pleno ordinario de la Asamblea de Extremadura celebrado el pasado jueves. El objeto de esta intervención fue el de realizar un balance y seguimiento de los proyectos de regadíos que afectan a la región.

Durante su comparecencia, aseguró que se está ejecutando una política de regadío “bien planificada y ajustada” a la realidad de los recursos hídricos con los que cuenta Extremadura y señalaba que “sabemos que los nuevos regadíos son un camino largo, pero con buena planificación, con mucho rigor y el consenso con los regantes lo conseguiremos”.  

Detallando los proyectos uno a uno, comenzó mencionando el regadío de Villanueva del Fresno y explicó que el Consejo de Gobierno había dado el visto bueno a un decreto por el que se aprueba el Plan General de Transformación en regadío de 260 hectáreas de la finca comunal de Villanueva del Fresno, cuyo inicio de las obras está previsto para el primer trimestre de 2018.

En cuanto al regadío Tierra de Barros, la consejera apuntaba que “nos encontramos” un proyecto “sin planificación ni financiación”, mientras que el actual equipo de la consejería “ha hecho entrega a los regantes de los trabajos realizados hasta ahora, que son el proyecto básico, el Plan General de Transformación de la zona Tierra de Barros, el estudio de viabilidad y la evaluación ambiental estratégica porque creemos en la viabilidad del proyecto”.

Asimismo, se encuentra en ejecución desde el pasado mes de septiembre la red terciaria del sector 1 licitada por importe de 750.000 euros que va a suponer la culminación de la transformación de 1.826 hectáreas en el término municipal de Navalvillar de Pela.

Otro de los proyectos que ha recibido un gran impulso ha sido el de Monterrubio de la Serena. García indicaba que el Diario Oficial de Extremadura (DOE) había publicado la licitación de los trabajos de consultoría y asistencia técnica para la redacción del Proyecto constructivo y Plan de Obra de la transformación en regadío de 1.200 hectáreas mediante el empleo de recursos locales de la zona regable singular de Monterrubio de la Serena.

También recordó la autorización de la convocatoria de ayudas para la creación de infraestructuras de almacenamiento de agua y regulación para el riego en las comunidades de regantes ubicadas en zonas de montaña. “Si queremos que nuestro sector agrario siga teniendo un papel destacado necesitamos, sí o sí, modernizar y ampliar nuestros regadíos, sobre todo, a través de riegos de apoyo”, concluía la consejera.

El resto de grupos criticaron duramente las políticas de la Junta en materia de regadíos, destacando que se “deja de lado” la opinión de los agricultores y ganaderos de la región.