La desigualdad y el mayor riesgo para la mujer de morir por infarto
9 de Septiembre de 2019
Aunque la angioplastia primaria, el tratamiento de elección en el infarto agudo de miocardio, ha aumentado en ambos sexos en los últimos años, las mujeres siguen recibiéndola menos que los hombres.
Como consecuencia de esta desigualdad en la atención a las mujeres con dicha patología, éstas tienen un 18% más riesgo de morir por infarto que los hombres.
Así se desprende de un estudio de la Sociedad Española de Cardiología (SEC) y la Fundación Instituto para la Mejora de la Asistencia Sanitaria (Fundación IMAS), que fue presentado en el Congreso de la Sociedad Europea de Cardiología (ESC Congress), la semana pasada.
Los resultados de esta investigación “ofrecen una oportunidad para reducir las desigualdades existentes entre sexos en el tratamiento del infarto agudo de miocardio”.
ANGIOPLASTIA PRIMARIA
Es el tratamiento de elección en el infarto agudo de miocardio, es un 15% menos frecuente en las mujeres que en los hombres; y el riesgo de morir por un infarto es un 18% mayor en las mujeres, después de ajustar la mortalidad por la edad y las comorbilidades. El menor uso de la angioplastia primaria en ellas juega un papel primordial.
El estudio ha analizado todas las altas hospitalarias por infarto entre 2005 y 2015 en nuestro país. De los 273.182 pacientes seleccionados para la investigación, el 28.8% eran mujeres. De media, las mujeres eran 10 años mayores que los varones y comorbilidades como la diabetes, la demencia, la insuficiencia renal o la insuficiencia cardiaca eran más frecuentes en ellas.
En los 11 años de estudio, el uso de la angioplastia primaria se ha incrementado en ambos sexos, pasando de un 35% a un 68% en los hombres; y de un 22% a un 53% en las mujeres. Sin embargo, y a pesar de la existencia de redes de atención al infarto, su uso en mujeres es un 15% menor que en los hombres, manteniéndose esa disparidad a lo largo de los 11 años de investigación.
“El 47% de las mujeres con infarto agudo de miocardio en 2015 no recibió angioplastia primaria frente al 32% de los hombres”, indica la doctora Antonia Sambola, miembro de la SEC y directora del trabajo, quien añade que “las redes de atención al infarto han mejorado el pronóstico tanto en hombres como en mujeres, pero no han conseguido disminuir las desigualdades en la atención, por lo que se mantienen las diferencias en la mortalidad”.
DESIGUALDAD EN LA ATENCIÓN: RAZONES
Numerosas razones pueden explicar estos resultados. “En el caso de las mujeres, existe un retraso en la búsqueda precoz de asistencia médica con graves consecuencias en el impacto pronóstico del infarto”, asegura la experta.
Esto se debe al “desconocimiento de la sintomatología del infarto por parte de la sociedad y a la falsa creencia de que el infarto es solo cosa de hombres”. El 90% de las mujeres presentan dolor torácico, al igual que los hombres, pero también están presentes en ellas una serie de síntomas adicionales no tan característicos que pueden confundir.
Sambola explica que “los errores diagnósticos también son más frecuentes en mujeres que en hombres, ya que muchos profesionales atribuyen el dolor torácico en mujeres a otras causas como artrosis o ansiedad”. Además, se considera que las mujeres son menos propensas a obtener beneficios de la angioplastia primaria, aunque “esa afirmación no ha sido demostrada ni en términos clínicos ni en resultados de coste-beneficio”.
Para la experta, los resultados de esta investigación “ofrecen una oportunidad para reducir las desigualdades existentes entre sexos en el tratamiento del infarto agudo de miocardio”.
Noticias relacionadas
Comenta esta noticia
A Fondo