Las viviendas de la Guardia Civil ya cuentan con agua corriente

Así lo ha afirmado el alcalde de Badajoz, Francisco Javier Fragoso, tras dar cuenta de los asuntos relacionados con el COVID-19.

Ayer el Juzgado de lo contencioso autorizaba al consistorio pacense para acceder al bloque de pisos de la Guardia Civil, ubicado en la barriada pacense de Suerte de Saavedra.

Por tanto, podrán habilitar un punto de agua corriente para abastecer a las personas que ocupan ilegalmente las viviendas.

“Esta acción es excepcional y durará lo que se mantenga vigente el estado de alarma”, puesto que, “no hay que olvidar que son ocupantes ilegales de una vivienda pública”.

Del mismo modo, el alcalde no entiende el motivo que ha llevado al dueño de los bloques a no dar acceso y, por consiguiente, haber tenido que recurrir a la justicia.

A lo largo de este fin de semana procederán a establecer el punto de agua corriente.

El pasado 27 de marzo, una vecina de la barriada a través de 7Días y mediante un escrito, pedía encarecidamente ayuda para estas familias sin recursos.

CARTA VECINA SUERTE DE SAAVEDRA

Me dirijo a usted, Francisco Javier Fragoso, dada la situación que estamos atravesando de alarma sanitaria.

Soy vecina de Badajoz, del barrio Suerte de Saavedra. Como usted bien sabe, en mi barrio hay varias familias que ocupan de manera irregular algunas viviendas en los bloques de la Guardia Civil. Estas personas, entre las que se encuentran familias con menores y personas mayores están sufriendo mucho las consecuencia de este estado de alarma.

Las normas de confinamiento nos impiden salir de casa y prohíben expresamente la reunión ni visita a domicilios, pero como también sabe, estas familias no tienen acceso a agua corriente en sus viviendas. Esto ha provocado que las familias sufran una situación incompatible con el estado de alarma sanitaria. Fíjese, señor alcalde, que es tal su situación que a mi personalmente me piden venir a mi casa a ducharse, aseo personal, necesidades básicas o lavadoras, petición a la que no puedo negarme.

Entiendo que es una situación irregular, andar de bloque en bloque, de vivienda en vivienda, duchándose, transportando ropa, en definitiva, rompiendo el confinamiento. Pero, ¿qué otra opción tienen estas familias para poder realizar estas tareas de higiene básicas que precisan de agua corriente?

Será consciente, señor, que yo misma y mi familia estamos poniendo en riesgo nuestras vidas y la posibilidad de contagiarnos porque creemos que es un derecho básico el tener acceso a agua corriente, máxime, en una situación de confinamiento obligatorio como el actual.

Reconozco el gesto de llevarle agua potable envasada a estas familias, pero el abastecimiento no se le hace de manera habitual y estas familias tienen necesidades básicas que cubrir cada día y somos los vecinos del barrio los que estamos exponiéndonos al contagio para poder ofrecer a estas familias una situación de higiene y dignidad mínimas que debería tener todo ser humano.

¿Quién será el responsable si se contagian nuestras familias por esta situación, señor Fragoso?

Atentamente: Fátima Mendoça Graça.