Marrero se convertirá este derbi en centenario en Segunda B

Este fin de semana tendrá lugar el derbi por antonomasia del fútbol extremeño. Con el estadio Nuevo Vivero como escenario, el Club Deportivo Badajoz y el Mérida Asociación Deportiva medirán su suerte.

Será un partido especial dentro del grupo IV de Segunda División B. Lo será para los jugadores, para la afición y para la clasificación, porque ambos se encuentran en una posición peligrosa, pero sin duda lo será para uno de sus protagonistas.

Se trata de Juan Marrero Roig, actual entrenador del Club Deportivo Badajoz. El técnico valenciano cumplirá 100 partidos en la división de bronce del fútbol español. Lo hará contra el eterno rival del equipo al que ahora mismo dirige.

En 2010 Juan Marrero tuvo la oportunidad de entrenar al Extremadura Unión Deportiva en Segunda B después de conseguir el ascenso. 14 jornadas duró la alegría porque fue destituido tras un irregular principio de liga.

Después dirigió en la categoría de bronce al Arroyo Club Polideportivo. La pequeña población cacereña de Arroyo de la Luz disfrutó con su equipo esa temporada, e incluso durante la primera vuelta se situó en puestos de play off de ascenso a Segunda División.

Para el recuerdo quedará aquel 2 – 5 al Cádiz en el estadio Ramón de Carranza o la alegría de los jugadores y afición tras la permanencia conseguida cuando quedaban aún muchos puntos por jugar.

El Club Deportivo Badajoz lo ficharía en Tercera División. Un proyecto muy ambicioso en el que los blanquingros buscaban ascender a Segunda División B y lo consiguió, no sin sufrimiento.

Ya en 2ºB Juan Marrero ha dirigido al equipo dándole un carácter fuerte, llevando la presión alta a la máxima potencia. A pesar de un mal inicio y de no conseguir despegarse de los puestos de abajo es un entrenador muy querido por su afición.

Ahora tiene la oportunidad, en su partido 100 en Segunda División B, de darle una de las mayores alegrías a la afición blanquinegra, que no es otra que ganar al eterno rival en el feudo blanquinegro, y escapar ligeramente de los puestos de abajo.