OPINIÓN: Vergeles y sus nauseabundas palabras
18 de Abril de 2018
José María Vergeles: dícese del actual consejero socialista de Sanidad de la Junta de Extremadura. Y conocedor de su reciente trayectoria la primera pregunta que me viene a la mente es ¿consejero de qué?, pues con consejeros como este, la “flamante” Sanidad extremeña que siempre defendieron a capa y espada desde el socialismo, se encuentra en serio peligro de extinción.
Nunca antes, y reitero, nunca, ni en el ejercicio de mi profesión ni como extremeño había leído semejante barbaridad de un consejero de la Junta.
Resulta abrumador y normal el gran consenso existente entre los extremeños respecto a las palabras de este hombre, y es que la segunda pregunta que me viene a la cabeza es ¿en manos de quienes estamos?
Si el propio consejero de Sanidad, de izquierdas, argumenta que las gigantescas Listas de Esperas Sanitarias extremeñas están para que los pacientes enfermos tengan un periodo para reflexionar,… es que el neosurrealismo se ha hecho un hueco en el equipo de Gobierno de Vara.
El hecho de que lo exprese públicamente es de una intención o descuido demoledor, pero ya solo el hecho de pensarlo es repugnante, perdona que le diga.
Y es que en la política actual casi todo vale: se puede engordar un currículum, se pueden prometer ante notario decenas de ilusiones incumplidas, se pueden intentar silenciar según qué cosas mirando para otro lado, se pueden anunciar proyectos ilusorios que nadie ve,… pero las palabras de Vergeles son harto complicadas de digerir para cualquier ciudadano de a pie; sea de derechas, de izquierdas, regionalista, de la esquina o apolítico.
A pesar de tanto, personalmente me da exactamente igual lo que Fernández Vara haga con su equipo de consejeros, pero los extremeños merecen una explicación y muchas disculpas… Si, nosotros, estos tontitos acostumbrados a unas tragaderas y paciencia ilimitadas.
Discrepo si alguien en su sano juicio sería capaz de realizar tales afirmaciones, pues la Salud es lo más valioso que tiene el ser humano, y cachondearse de esta manera de los 140.000 extremeños que se encuentran en las Listas de Espera es denigrante.
Yo, gracias a Dios, no lo estoy. Sino jamás se lo perdonaría. Pero me vienen a la mente la ingente cantidad de extremeños que esperando y esperando pierden su vida señor Vergeles.
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