Personal del INFOEX asegura que hay turnos en los que no se cubren los puestos de vigilancia

CARTA-DENUNCIA

La Junta de Extremadura, a través del Plan de Lucha Contra Incendios Forestales de Extremadura (Plan Infoex) dispone de puestos de vigilancia de incendios en diversos puntos estratégicos de la región para detectar, alertar y controlar cualquier indicio de fuego producido en nuestra Comunidad Autónoma.

En el verano de 2019 se quedaron sin cubrir varios puestos vacantes de vigilantes del Plan Infoex dejando algunos puestos de vigilancia con 3 trabajadores en lugar de 4. Como consecuencia de ello, el puesto de vigilancia permanecía cerrado las horas que debiera trabajar el 4º componente.

Este verano de 2020 la situación se ha agravado considerablemente. No se han cubierto los puestos de vigilancia vacantes de 2019, y con la excusa de cubrir puestos vacantes en Retenes de Incendios han quitado puestos de trabajo de vigilante para cubrir esos puestos, y muy probablemente con carácter definitivo.

El resultado es que los puestos de vigilancia se han quedado con 2 o 3 trabajadores en muchos casos y los puestos se cierran durante las horas que corresponderían a los componentes que faltan.

Con esto tenemos casetas en las que sólo se cubren 12 horas de vigilancia al día y permanecen cerradas el resto del tiempo. Y otras casetas que a lo largo de la semana abren unos días y cierran algunas noches.

Para colmo, las horas que se cierran los puestos de vigilancia son las nocturnas, justo cuando hay menos probabilidad de que cualquiera llame al 112 para alertar de un incendio, y se empeñan en cubrir las horas diurnas modificando turnos a su antojo, dejando desprotegido el territorio durante la noche.

Las Normas de Organización y Funcionamiento del personal del Plan Infoex en Extremadura (Decreto 174/2006 de 17 de Octubre) en su artículo 9.1 dice expresamente que “La vigilancia de incendios será continua durante las 24 horas, para lo cual se establecerán los turnos correspondientes.”

Por tanto, estamos ante una gran irregularidad normativa que habrá que ver a quien corresponde responsabilizar y qué consecuencias puede llegar a tener.

¿Quién se responsabilizaría de un incendio que ocurre durante las horas que permanece cerrada la caseta, del tiempo perdido en avisos y salidas de medios, y de posibles graves consecuencias para el medio ambiente, las propiedades o las personas, cuando de haber estado abierta todo se habría minimizado?

En los vigilantes están creando una gran crispación con desmotivación del personal, viendo cómo no valoran su trabajo, que los entienden prescindibles, con pérdidas económicas, y que ven lo poco que les preocupa a sus superiores la protección del medio natural ante los incendios y la situación personal y laboral de sus trabajadores.

Pedimos que esta situación se solucione cuanto antes, que no se vuelva crónica, como parece ser que quieren algunos y que toda Extremadura pueda sentirse protegida por la importante labor de estas personas, tanto por el día como por la noche.

FIRMADO: Abel Solís Fernández.