Recogida de apoyos al regadío en Don Benito

Las personas e instituciones que promueven la conversión en regadío de la zona de arroyo del Campo, en el triángulo formado por las localidades de Don Benito, Villanueva de la Serena y La Haba, amplían la recogida de “voluntades de riego” a la zona de Los Quintos.

“La Mesa de Trabajo de Regadío de Arroyo del Campo, liderada por la Consejería de Medio Ambiente y Rural, Políticas Agrarias y Territorio, ha acordado en una reunión celebrada en Don Benito ampliar la recogida de voluntades de riego a la concentración parcelaria de Los Quintos, que afectaría en torno a 1.600 y 1.900 hectáreas de dicha zona”, afirma el gabinete de comunicación de la Junta de Extremadura en una nota divulgativa.

El proyecto de transformación agraria de la zona de arroyo del Campo tenía dos fases; una primera conocida como concentración parcelaria de Arroyo del Campo, y una segunda fase de ampliación que eran Los Quintos.

Para la primera fase, además de constituir la mesa de trabajo conjuntamente con los ayuntamientos implicados, se informó a los municipios afectados y hubo la recogida de voluntades de riego, “en la que ha habido algunas dificultades, como que hay una parte de propietarios que no son agricultores y también que hay agricultores que no tienen relevo generacional y no han considerado conveniente la firma de esas voluntades de riego para que este regadío saliera adelante’’, afirma Manuel Mejías, secretario general de Desarrollo Rural y Territorio de la Junta de Extremadura.

Ya se ha recogido el 50 por ciento de las voluntades de riego de las personas que tienen tierras en la zona de arroyo del Campo afectada por el proyecto. “Estamos hablando de algo más de 2.000 hectáreas”, afirma el secretario general de Desarrollo Rural y Territorio.

Para intentar sacar adelante el proyecto en una fase de ejecución, que incluiría a las dos concentraciones parcelarias, en los próximos meses se recogerán las voluntades de riego de Los Quintos.

“Eso nos va a permitir dimensionar el proyecto en una realidad mucho mejor, porque hay que decir que el anteproyecto contemplaba la red primaria para regar las dos fases y en este caso, una vez recogida las voluntades de riego de las dos concentraciones parcelarias sí dimensionaría esa red primaria de acuerdo con las voluntades de riego recogidas’’, explica Mejías.

“La política de regadío es una política estratégica, dado que Extremadura cuenta con capacidad de embalse de agua suficiente que nos permite crecer en hectáreas en regadío y por tanto, lo tenemos que aprovechar para crecer económicamente y para crear riqueza y empleo y de ahí, que estemos trabajando en varios proyectos de regadío en nuestra región’’, afirma el secretario general de Desarrollo Rural y Territorio.