Renfe finaliza la obra para la nueva Base de Mantenimiento de Badajoz

Renfe ha dado por finalizadas las obras de la nueva Base de Mantenimiento de Badajoz. La compañía ultima estos días los trabajos para la dotación de los medios productivos asignados a estas instalaciones, así como las tareas de homologación con la Agencia Estatal de Seguridad Ferroviaria (AESF). Una vez acabadas, permitirá la actividad en las nuevas instalaciones.

Isaías Táboas, presidente de Renfe, ha anunciado en el Comité de Dirección de la compañía el final de este nuevo Taller que supone una mejora en los recursos asignados al mantenimiento de la flota diésel de Media Distancia Extremadura, con una inversión de 1,4 millones de euros.

Esta nueva Base tiene una superficie de 1.200 metros cuadrados y cuenta con una nave compuesta por dos vías interiores de 120 metros de longitud, con preinstalación de electrificación y preparadas para realizar el mantenimiento de trenes de hasta 110 metros.

Podrán realizarse trabajos de primer nivel como reparaciones y revisiones de corto y medio alcance en los trenes diésel de Media Distancia que prestan servicio en la Comunidad. Con esto logran mejoras en el mantenimiento ya que se minimizan los desplazamientos a Madrid.

Además, las instalaciones cuentan con las herramientas necesarias para llevar a cabo actividades de mantenimiento de trenes eléctricos o locomotoras.

Este proyecto fue fruto del compromiso entre el equipo del Ministerio de Fomento y Extremadura para la mejora del servicio en la Comunidad. También permitirá la reordenación de la asistencia técnica en el territorio para garantizar en todo momento los niveles de mejora alcanzados en el servicio y reducirá de manera progresiva el acompañamiento de personal técnico a bordo.

MEJORA DE LA FIABILIDAD DEL SERVICIO

La nueva Base forma parte de otro plan estratégico de Renfe de hace dos años con el objetivo de mejorar la fiabilidad del servicio, con una reducción de incidencias, con datos que han superado ampliamente los objetivos de la compañía.

Las incidencias en cuestión de material rodante de Renfe, con demoras de más de 5 minutos ha bajado al 89% respecto al año 2018, donde la media estaba en 100 incidencias mensuales durante los seis primeros meses, mientras que en los primeros meses de 2019 la media bajó a 23 incidencias al mes. En este año, la media ha estado en 11 casos mensuales.

Entre las mejoras que se han realizado desde el 2018 destacan la mejora de la regularidad del servicio, la renovación de la flota, el plan de fiabilidad del material, la monitorización remota de los trenes, la ejecución de auditorías internas o la renovación de los protocolos de actuación en caso de contingencias en el servicio.

A todo esto, se suma la inversión y las mejoras ejecutadas en las infraestructuras que ha permitido que la duración de los viajes sea menor.