Tres huracanes conviven en el Atlántico

Hace unos días informábamos sobre la formación de un nuevo huracán que se encontraba en medio del Atlántico, sin que se conociera por ese entonces el rumbo que tomaría.

Después, el Huracán Florence, el de mayor fuerza desde que comenzara la temporada de huracanes el 30 de junio, perdió fuerza hasta degradarse en tormenta tropical.

Pero durante las últimas horas aumenta sus vientos, refuerza su estructura, vuelve a apreciarse su ojo central, y con categoría 3 pone rumbo a la costa este de los Estados Unidos.

El Centro Nacional de Huracanes, con sede en Miami (Florida), mantiene bien definida su trayectoria, se espera que tome tierra entre los estados costeros de Carolina del Sur y del Norte el próximo 13 de septiembre.

¿El problema? Que lo hará casi con toda probabilidad con categoría 4 e incluso 5 (Huracán Mayor), con rachas de viento que podrían alcanzar los 300 kilómetros/hora, olas de 5 metros e inundaciones.

ISAAC

El segundo es un huracán fuerza 1, y al igual que los dos restantes se originó en las costas de Cabo Verde (África).

Se esperan que mantenga vientos huracanados hasta que tome tierra en las Antillas Menores, la barrera de islas que da paso al Mar Caribe (Antigua y Barbuda, Martinica, Trinidad y Tobago, Barbados, entre otras).

Pronostican que tras haber pasado por encima de ellas pierda fuerza.

HELENE

El tercero en discordia se encuentra ubicado actualmente a unos 500 kilómetros de Cabo Verde. La influencia de los dos restantes hará que su trayectoria no sea la habitual.

De categoría 2, durante las próximas horas Helene se convertirá en el segundo Major de la temporada al alcanzar la categoría 3 en la escala Saffir Simpson, esto es, rachas de vientos de 200 kilómetros hora.

¿Su rumbo? Para los próximos 3 días se espera que gire dirección noreste, para enderezarse verticalmente, entrando en aguas menos cálidas y degradarse a tormenta tropical dirección a las portuguesas Islas Azores.

A partir de ahí será una incógnita su trayectoria.

Seguiremos informando de esta anómala situación, pues es poco habitual observar cómo cohabitan tres huracanes en el Atlántico.