Un poblado extremeño incomunicado en plena crisis del Coronavirus

Este viernes, 27 de marzo, la familiar de una vecina del poblado Pantano de Cíjara (Cáceres) se ha puesto en contacto con 7Días para denunciar la situación que vive la España Vaciada.

El poblado Pantano de Cíjara es una pedanía perteneciente al municipio de Alía (Cáceres) que se ubica en medio del Pantano del Cíjara, en el límite provincial entre Cáceres, Badajoz, Toledo y Ciudad Real.

La denunciante M.S.M.A nos ha comentado que en el poblado viven de forma permanente unas 40/50 personas “en su mayoría de avanzada edad”, y que de forma esporádica -fines de semana, periodos vacacionales o temporadas de pesca- el poblado acoge más de un centenar de personas.

La mujer, nuera de una vecina de la localidad, expresa que el poblado se encuentra completamente incomunicado vía telefónica -tanto fija como móvil- con lo que ello supone en la situación de confinamiento que estamos viviendo decretada por el Estado de Alarma.

PETICIÓN

“Buenas tardes, soy M. S. M. A. vecina de Pantano de Cíjara, una pedanía de Alía (Cáceres) donde sus vecinos (alrededor de 120 personas) están sin teléfono, incomunicados desde hace varias semanas no pudiendo llamar a médicos, farmacias, familiares o algún vecino para solicitarles ayuda como pedir comida, medicación, etc.

En la situación que estamos viviendo actualmente es indignante que no tengan acceso a algo tan básico como es el teléfono, la única vía de comunicación posible debido al confinamiento en el que vivimos.

A esto añadimos que más del 90% del poblado son personas mayores y que el pueblo no cuenta con ningún establecimiento abierto en este momento.

Ésta es la España Vaciada, por favor pedimos que nos den una solución lo antes posible. Gracias”.

En conversación con la mujer (que se encuentra fuera del poblado por motivos de trabajo) nos comenta que llevan padeciendo unos 3 o 4 meses esta situación, que varios operarios han ido al poblado algunas veces para arreglar la situación, “pero a los 10 minutos ya no funciona”.

Añade que en periodo electoral el ayuntamiento colocó una antena, pero no funciona, recordando que Alía se encuentra a unos 40 kilómetros por carretera, y en Puerto Rey (otra pedanía de Alía) tampoco hay nada abierto.

“Mi suegra está allí sola, sin tener noticias de ella, salvo cuando la repartidora de Correos (que va dos veces por semana al poblado) se ocupa de comunicarnos o intercambiarnos comida, medicamentos, etc”.

“Rara vez llega algún whats app, y la única forma de tener comunicación es ir al consultorio, que dispone de red”.

“Hagan algo”.